miércoles, 31 de octubre de 2018

¿Qué literatura de Cuba es funcional al Gran Hermano editorial y mediático?




Cuba es un país de cultura que produce artistas en grandes cantidades. Profesionales de la música o la danza que residen en la Isla han conseguido reconocimiento y promoción en el exterior, al margen de condicionantes políticos. No es el caso de la literatura. Quienes han logrado publicar en editoriales extranjeras son, en su mayoría, quienes centran su obra literaria –y sus declaraciones públicas- en el ataque al gobierno y al sistema político de la Isla.

lunes, 29 de octubre de 2018

Por qué no me canso de decir: ¡Abajo el bloqueo!




Grupo de solidaridad Cuba Sí.

Hace algunos años nuestra organización de solidaridad con Cuba en Alemania Cuba Sí organizó una campaña con el objetivo de recaudar fondos para la compra de un buldócer cuyo destino sería la Empresa Genética Valle del Perú situada en la provincia de Mayabeque.
De esta forma queríamos hacer nuestro aporte a la lucha contra el marabú que tanto azota a los campos cubanos. La campaña fue todo un éxito lo que nos permitió recaudar en menos de tres meses los 160 mil euros necesarios para la compra de un buldócer. Sólo nos quedaba entonces la engorrosa tarea de “encontrar” una empresa dispuesta a vendernos el equipo, cosa aparentemente muy normal en un país capitalista, pero no cuando se trata de Cuba.
Finalmente encontramos una en un país suramericano. El buldócer debía llegar a Cuba cuatro semanas después de haber realizado la compra. Debido a las “regulaciones” (violaciones) del bloqueo el Departamento del Tesoro de EE.UU. confiscó los 60 mil euros correspondientes a la primera partida enviada por transacción bancaria.
Después de una larga “lucha” a la firma chilena le fue devuelto el dinero confiscado. Las consecuencias por haber “violado” el bloqueo fueron funestas a tal punto que la empresa tuvo que cambiar el nombre y la dirección.
Encontrar una agencia de transporte marítimo dispuesta a transportar el buldócer a Cuba fue también una odisea que duró casi cinco meses. Después supimos que “nuestro” buldócer había recorrido casi todos los puertos del Caribe. Llegó a Cuba mientras nos encontrábamos participando en la Feria Internacional de Libro de La Habana. Cuando nos enteramos de la noticia no la podíamos creer. Nos dispusimos a realizar los trámites para su recogida en el puerto, al llegar al mismo nos enteramos que el capitán del barco estaba exigiendo una cantidad astronómica de dinero para entregar la carga porque según él, no sabía que debido al bloqueo no podría entrar a un puerto estadounidense en los próximos seis meses por haber cometido el “crimen” de comerciar con el enemigo transportando un buldócer, cuyo objetivo sería combatir al marabú.
Esta no es la única mala experiencia que como Cuba Sí hemos tenido con el bloqueo que no solo viola los derechos humanos del pueblo cubano sino también los de ciudadanos, empresas y bancos de terceros países.
En Alemania le han confiscado cuentas bancarias a tiendas o negocios por vender productos cubanos como miel, café o ron. Ciudadanos cubanos residentes en este país se han visto imposibilitados de hacer un contrato con una empresa estadounidense o alemana que tengan acciones en EE.UU., como alquilar un hotel o viajar en un crucero.
El “crimen” cometido es siempre el mismo, ser portadores de la ciudadanía cubana. Cuando los Rolling Stones quisieron presentar en Berlín su documental sobre el concierto en La Habana, a todos los fanáticos que quisieron comprar su entrada a través de sus cuentas bancarias y pusieron como “referencia” “Concierto en La Habana” les decomisaron el dinero.
La empresa de transporte marítimo a través de la cual nuestra organización ha realizado el envío de contenedores a Cuba durante más de 20 años nos comunicó con mucha “pena” que no podrían seguir haciendo los trámites para el envío de nuestros contenedores porque sus socios comerciales estadounidenses no se lo permitían. En cierta ocasión nos decomisaron dinero por haber cometido el “error” de poner “Guantánamo” en la “referencia” al hacer una transacción bancaria para la compra de piezas de repuesto para nuestro proyecto lechero situado en la provincia del mismo nombre.
A nuestra organización Cuba Sí se le hace cada día más difícil realizar compras de insumos productivos y equipamientos para nuestros proyectos de ayuda al desarrollo en los campos cubanos porque los mismos bloqueadores de siempre nos están persiguiendo con todos los medios a su alcance. En la mayoría de los casos tenemos que callarnos la boca para no comprometer o perjudicar a ciudadanos y empresas de buena voluntad que no están dispuestos a someterse a los dictados de los EE.UU.
Gracias a Cuba Sí, conocí a Carlos Landrove, es un niño cubano de cinco años que desde hace más de 12 meses permanece en el Instituto Nacional de Oncología y Radiobiología (INOR) de La Habana debido a un tratamiento que está recibiendo contra el cáncer. Sólo en esa institución cubana son tratados de forma gratuita entre 300 y 400 niños que padecen de esta penosa enfermedad. Para tratar el cáncer se requiere de tecnologías y medicamentos avanzados, además de cuantiosos recursos materiales que en el caso de Cuba se encarecen cada día más como consecuencia del inhumano e injusto bloqueo. En muchas ocasiones, aun teniendo el dinero, a Cuba se le dificulta adquirirlos debido a esta descabellada política estadounidense.
¿Entienden ahora por qué los jóvenes diplomáticos cubanos le cantaron las cuarentas a la delegación de EEUU y a sus marionetas cuando en la ONU intentaron montar un espectáculo anticubano en el salón de sesiones de su Consejo Económico y Social para condenar a Cuba por supuestas violaciones de los Derechos Humanos?
¿Por qué les cuento esto?
He leído varios artículos donde sus autores hacen una lista de los males que azotan a la sociedad cubana, y al final a la lista de males les suman el bloqueo. Antes del bloqueo están cosas como que en Cuba nadie puede tener más de una casa, ni más de dos carros, etc. “Más de dos casas y más de dos autos”, y yo que pensaba que los cubanos en Cuba tenían otras preocupaciones.
A unos días de que la ONU vote el informe sobre la “Necesidad de poner fin al bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por los Estados Unidos de América contra Cuba”en la ONU, publicar cosas así, que minimizan o relativizan el impacto real y criminal del bloqueo le hacen el juego a la maniobra yanqui para desmovilizar el voto que acaba de denunciar el Canciller cubano.
Yo jamás me cansaré de condenar ese bloqueo que tanto daño le hace al pueblo cubano sobre todo en estos momentos en que al parecer crece la difusión de las tendencias que pretenden negar que este bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por los Estados Unidos contra Cuba constituye el principal obstáculo para el desarrollo de la economía cubana.
La sociedad cubana no es perfecta, ya eso lo sabemos todos, sabemos de la problemática de la vivienda, de las pensiones y los salarios. Es cierto, y los salarios y las pensiones no alcanzan, pero cuando hablamos de salarios y pensiones bajos se suele obviar por los mismos que omiten o relativizan el impacto del bloqueo que la inmensa mayoría del pueblo cubano no tiene que pagar alquileres por sus viviendas, recibe subsidios en servicios básicos como agua, electricidad y una parte de los alimentos, así como que la salud y la educación son gratuitas. Yo sé que lo de la salud y la educación gratuita suena reiterativo pero es una realidad que nadie puede negar. Hay que vivir en un país capitalista para comprender el valor que tienen esas cosas.
Yo que no vivo en Cuba sé que en mi país mucha gente ha acumulado bienes y riqueza ejerciendo oficios que requieren poca calificación, lo que no constituye un delito siempre y cuando lo hayan hecho de manera lícita. Sí soy de la opinión de que el gobierno cubano debe perfeccionar su sistema tributario y como en todos los países del mundo perseguir a todo aquel que no pague sus impuestos como está establecido. En todos los países del mundo cada cual paga sus impuesto en dependencia de lo que cobre o gane a través del trabajo o el negocio que realice. No puede ser que todos los que administren un restaurante paguen el mismo impuesto sin tener en cuenta las ganancia de cada cual. El ministerio de finanzas alemán ha llegado al punto de pagar dinero a empleados de bancos en países conocidos como paraísos fiscales por informaciones sobre los clientes alemanes que depositan grandes sumas de dinero en esos bancos para evadir los pagos de impuesto.
No es lógico que algunos cubanos no paguen los impuestos según las ganancias que tienen y que al final ricos y pobres disfruten de las gratuidades del sistema de salud o de aducción cubano por igual y sin distinciones. Eso no es justo. No se trata de encontrar fórmulas para evitar que la gente se enriquezca, ni de un supuesto miedo de las autoridades hacia la “concentración o acumulación de riquezas” pero no se puede ignorar que una de las “deidades” del liberalismo está en la desenfrenada acumulación de riquezas de unos pocos por un lado, y la acumulación de pobreza por parte de otros tantos cientos de millones de seres humanos por el otro.
Hay que tener cuidado en no confundir “riqueza” con el valor producido. ¿Es normal que una sola persona agote las existencias de un producto para después revenderlo a precios más altos? Según el último informe demográfico de las Naciones Unidas la población mundial alcanzó en 2017 los 7.500 millones de personas y según la ONG británica Oxfam el 82% del dinero que se generó en ese año fue a parar a manos del 1% más rico de la población global. La evasión de impuestos, la influencia de las empresas en la política, la erosión de los derechos de los trabajadores y el recorte de gastos son las razones fundamentales que traen consigo tanta desigualdad. ¿Es esto lo que queremos para Cuba?
Hace una semana nuestra organización recibió como donativo por parte de un hospital de la Cruz Roja de Alemania (DRK) 10 bombas de infusión y 10 jeringuillas perfusoras que por su estado técnico podrían ser utilizados en Cuba al menos 20 años más. Este donativo está valorado en alrededor de 40 mil euros. Durante la actividad de entrega un médico jefe del hospital quería saber cuánto debería pagar en Cuba un paciente por un tratamiento con ese tipo de bombas o jeringuillas perfusoras. Se quedó atónito cuando le dije que en Cuba los servicios médicos son gratis.
“¿Cómo qué gratis? ¿Quién los paga, los Castros?” Me preguntó lleno de asombro. Yo para no entrar en detalles le dije simplemente que no, que en Cuba los gastos de la educación y la salud son totalmente gratis para todo el mundo, sin credos, ni distinciones. “¿Pero cómo es que un país como Cuba con pocos recursos económicos puede darse el lujo de asumir esos gastos tan caro?”, me dijo. Le dije que eso era una política irrevocable del Estado cubano. Entonces le pregunté cuánto costaría en un hospital alemán el tratamiento con una bomba de infusión. “Entre 1000 y 1500 euros por paciente diario”, me contestó. En ese momento el que se quedó atónito fui yo.
Cuando un país capitalista cae en crisis la primera medida que se toma es la de recortar los presupuestos dedicados a los gastos sociales. Durante el periodo más difícil sufrido por la economía cubana no se cerró ni tan siquiera una escuela, un hospital o consultorio médico, nadie perdió su domicilio por no poder pagar un alquiler, no hubo recortes en el sistema de salud.
¿Cómo es posible que los decisores y políticos cubanos pueden lograr lo que los capitalistas no pueden?
Esta pregunta también deben hacersela quienes relativizan el valor del bloqueo. Yo por mi parte cada vez que me pregunten cuáles son las causas que impiden el desarrollo de la sociedad cubana diré, el primer lugar lo ocupa el bloqueo, el segundo lugar lo ocupa el bloqueo y el tercer lugar por supuesto también lo ocupa el bloqueo, por más que tengamos muchas cosas que podemos hacer diferente para disminuir su efectocomo nos pasó con el buldócer. Pero cada día me convenzo más que sin el bloqueo los cubanos seríamos más felices y la sociedad cubana más próspera y equitativa, si tienes dudas, quítalo y verás.

Justo Cruz

Los intelectuales y el debate constitucional

Quisiera creer que se trata de un malentendido, pero todo indica que no lo es. Por ello siento vergüenza ajena. Y propia.
Ajena porque sé que no soy culpable: Fueron otros quienes decidieron y otros los que admitieron la decisión. Pero también propia, porque, a fin de cuentas, se supone que unos y otros estamos en la misma trinchera.
¿O será que no es así?
¿Será que quienes más repiten vocablos como “vanguardia”, “patria” y “revolución” ocupan en realidad una trinchera diferente de la nuestra, la de quienes hemos hecho de nuestras vidas una entrega a ideales patrióticos y revolucionarios?
No sé cómo se han manifestado los miembros de otras asociaciones dentro de la Uneac, pero me consta, pues al menos en tres ocasiones he estado presente, que los escritores hemos reclamado con insistencia nuestro derecho a participar, por nosotros mismos, como los intelectuales patriotas cubanos que somos, en la discusión del anteproyecto de constitución.
La respuesta siempre ha sido negativa. “Alguien de arriba” decidió que no nos reunamos para esa discusión. Para analizar la futura constitución están las asambleas de barrio o de centro de trabajo. La Uneac, que se clasifica como organización social, no gubernamental, con personería jurídica propia, acató la absurda decisión.
Pareciera que una ong reconocida por el Estado cubano no está capacitada para reunir a sus miembros para discutir, analizar, ampliar, mejorar, el texto legal supremo de la nación. Sus dirigentes lo aceptaron. No defendieron los derechos ciudadanos de los miembros de la Uneac.
¿Tenemos los intelectuales cubanos que esperar a que alguien nos oriente ser patriotas? ¿Debemos esperar “orientaciones de arriba” para serlo de hecho y de derecho, y no meros repetidores de consignas en la plaza pública o en los medios?
Los intelectuales cubanos, como ciudadanos, tenemos el derecho y la obligación de participar en la discusión de cuanto documento o ley incida sobre el tipo de nación en que se haya de convertir nuestra patria, el derecho y la obligación de participar como tales, en discusión entre pares, no en asambleas de centros de trabajo que no tienen por qué invitarnos, pues una gran cantidad de nosotros no pertenece a ellos, o de barrio, donde apenas podríamos expresarnos, pues no cuentan con las condiciones logísticas y de tiempo para discusiones profundas y detalladas sobre aspectos que no incidan de modo inmediato sobre la comunidad.
¿Quién nos impide participar?
¿Alguien “de arriba” decidió que en el concepto “pueblo” no entra el sector intelectual del país? ¿No somos de la república?
Por falta de espacios donde hacerlo, algunos hemos circulado por correo electrónico nuestras reflexiones sobre el tema constitucional. No pocos de esos textos contienen importantes aportes que se deberían incorporar al proyecto definitivo de constitución. Pero nadie nos ha hecho caso.
Y nuestra organización, la Uneac, no nos oye, no nos apoya. Nos ignora.
Hace más de medio siglo, Ernesto Guevara se refirió a los intelectuales del momento, y afirmó que el pecado original arrastrado por muchos de ellos era no ser verdaderamente revolucionarios.
La frase, propia de un contexto muy específico, fue aprovechada por quienes no eran verdaderamente revolucionarios ni tampoco verdaderos intelectuales. Devenidos cazadores de brujas, la interpretaron a su conveniencia y cometieron incontables crímenes contra la cultura nacional. A pesar de ello, los intelectuales heredados por la revolución dieron una contribución imposible de ocultar: Eran patriotas.
Guevara completaba su frase con una recomendación: Injertar perales en los olmos; esto es: Educar en la revolución a quienes llegaron a ella ya maduros. A la vez, sembrar perales; esto es: Formar las nuevas generaciones de creadores en el espíritu de la revolución.
Las nuevas generaciones de intelectuales cubanos, ni superiores ni inferiores a nuestros antecesores, nos formamos en la revolución, en ella hemos crecido y trabajado. Como parte del pueblo cubano, contribuimos a erigir un país que pretendemos con todos y para el bien de todos. Hemos crecido formando parte de un proceso lleno de luces y de sombras, como nosotros mismos, como nuestra obra personal. Comunistas y no comunistas, religiosos y no religiosos, diversos en nuestras concepciones y nuestras estéticas, en nuestros proyectos de vida, trabajamos día a día por una patria que creemos posible.
No somos creadores encerrados en nosotros mismos. Entre nosotros hay quienes fundaron armas dentro de las fuerzas armadas, alfabetizadores, combatientes internacionalistas, jueces legos, delegados del poder popular, dirigentes sindicales de base, maestros, trabajadores simples. Entre nosotros se cuentan sobrevivientes de la lucha contra la tiranía batistiana, incluso torturados por pertenecer a organizaciones revolucionarias. Todos juntos formamos la intelectualidad cubana de hoy.
Algunos críticos con el actuar gubernamental, otros más moderados, los creadores cubanos tenemos un común denominador: Amamos la tierra en que nacimos, somos patriotas cubanos. Como tales deseamos aportar nuestros criterios de ciudadanos a la nueva constitución.
¿Quién teme a la expresión de nuestras ideas? No será un revolucionario, seguramente: Es imposible ser revolucionario verdadero y temer a las ideas.
Ante la prohibición (y su aceptación por la Uneac), imagino la satisfacción de los herederos de los parametradores y cazadores de brujas de décadas atrás, ansiosos de revancha, felices por esta censura actualizada, esperando el momento en que tendrán manos libres para volver a imponer, tras una fraseología falsamente revolucionaria, su imperio de terror y mediocridad sobre la verdadera intelectualidad cubana.
Lamento la actitud de la Uneac como institución. Pierde con ello la que acaso sea su última oportunidad de rescatarse a sí misma como representante de los creadores del país. Regala armas a quienes afirman que no es más que un medio de control del gobierno sobre los escritores y artistas cubanos.
Lamento también el mutismo de nuestros premios nacionales en las distintas manifestaciones. Sus voces son más difíciles de silenciar que las nuestras.
Pero callan.
Aún se puede revertir la situación. Aún está la Uneac a tiempo de manifestarse como “organización social con fines artísticos y culturales, continuadora de las más auténticas tradiciones culturales, patrióticas y éticas de la nación cubana”. De no esperar por “orientaciones de arriba” y actuar como organización revolucionaria de hecho, no de consignas, y convocar a sus miembros a la discusión del anteproyecto de constitución.
Con permiso o sin permiso “de arriba”.

Rodolfo Alpízar. Escritor, lingüista y traductor. Desde hace décadas, es el principal introductor de la literatura africana de expresión portuguesa en Cuba, cuyos escritores más importantes ha dado a conocer. Licenciado en Lengua y Literaturas Hispánicas (Universidad de La Habana, 1974). Ha dictado cursos de introducción a la Terminología en universidades y organismos de traducción en su país, así como en la Oficina de la organización intergubernamental Unión Latina en Cuba. Ha asesorado a varios ministerios y organismos estatales del país en temas relacionados con la Terminografía. Traductor miembro de la Federación Internacional de Traductores (traductor FIT). Miembro fundador de la Asociación de Traductores e Intérpretes de Cuba (ex miembro del ejecutivo nacional, ex vicepresidente, ex presidente). Presidente de la Comisión de Ética de la Asociación de Traductores e Intérpretes de Cuba. Vicepresidente de la Sección de Traductores Literarios de la Unión Nacional de Escritores y Artistas de Cuba (UNEAC).

El Podcast de Cubadebate: La Ciencia no se dirige, se gestiona


viernes, 26 de octubre de 2018

miércoles, 24 de octubre de 2018

Si el socialismo es `miseria´, ¿para qué el bloqueo a Cuba y Venezuela?




Basado en un texto de Iroel Sánchez - Al Mayadeen.
La prensa corporativa se rió de Donald Trump, cuando en la ONU, de manera triunfalista, dijo que en dos años había conseguido “más que ningún otro gobierno en la historia” de su país.

lunes, 22 de octubre de 2018

La salvación está en crear




“Los jóvenes de América se ponen la camisa al codo, hunden las manos en la masa y la levantan con la levadura de su sudor. Entienden que se imita demasiado, y que la salvación está en crear. Crear es la palabra de pase de esta generación.”
Con José Martí y Nuestra América como destino emprendemos esta aventura espiritual que lleva por santo y seña La Pupila Asombrada.
Nos invita el Maestro a conspirar

domingo, 21 de octubre de 2018

Jesús Menéndez murió por un azúcar sin lágrimas




Su asesinato en la estación de trenes de Manzanillo, el 22 de enero de 1948, fue ordenado por el Imperialismo y la oligarquía nacional...

Tenía el nombre del Mesías, y eso fue para los trabajadores azucareros. Era negro como el ébano y fuerte como el acero. Sus abuelos esclavos lucharon en la Guerra de los Diez Años y su padre Carlos, con apenas 15 años, se incorporó a la Invasión de Oriente a Occidente a las órdenes de Antonio Maceo.
En los antiguos barracones aprendió Jesús Menéndez Larrondo de la cultura de sus ancestros, y en los cortes de caña supo de los sufrimientos del hombre humilde del campo. Las luchas sindicales fueron su escuela y la defensa de los obreros azucareros su escenario natural. Hablaba pausado y arrastraba ligeramente la erre, pero era un formidable orador, de los que encendían al auditorio con la palabra.
De joven abrazó la ideología comunista y llegó a convertirse en el principal dirigente azucarero de Cuba, en el el líder aclamado de la Federación Nacional de Trabajadores Azucareros (FNTA). Durante el gobierno de Carlos Prío se desempeñó también como Representante a la Cámara por el Partido Socialista Popular (PSP), por lo que gozaba de inmunidad parlamentaria.
Su condición de líder incorruptible y valor personal hacían del revolucionario nacido en Encrucijada, el 14 de diciembre de 1911, una persona a la que había que silenciar como fuera.
Sus luchas por el pago del Diferencial Azucarero, una medida de amplio beneficio popular, decretaron finalmente su muerte. Jesús lo sabía, pero se negaba a a aceptarlo. Así les respondió a los obreros azucareros, que intentaban protegerlo:
“¿Por qué me van a matar a mí si yo estoy defendiendo el derecho de los trabajadores y algo que además es bueno para la patria? ¿Cómo me van a matar? Mira chico, si me matan, ese diferencial hay que pagárselo a los trabajadores de todas maneras, y si me matan a mí, quedan ustedes para que sigan reclamando el diferencial azucarero”.
El 22 de enero de 1948 se cumplió el faltal designio. Esa tarde, en la estación de trenes de Manzanillo, fue asesinado de tres balazos de revólver por la espalda.
El brazo ejecutor fue el capitán Joaquín Casillas Lumpuy, quien, ante la negativa de Menéndez de dejarse conducir preso, le disparó a traición con alevosía, mientras le gritaba histérico: “¡Te dije que ibas vivo o muerto!”.
El cadáver del dirigente azucarero recorrió Cuba de Oriente a Occidente y en cada localidad le rindieron honores al líder proletario. En su sepelio, Blas Roca, secretario general del PSP, realzó sus cualidades excepcionales, y afirmó:
“Menéndez, que no solamente tiene capacidad e inteligencia para ser dirigente entre todos sus compañeros, sino que además tiene decisión y coraje para marchar al frente y pelear contra todos los enemigos por los derechos colectivos”.
Mientras, Nicolás Guillén amigo suyo y compañero de ideales, lo inmortalizó con su famosa Elegía a Jesús Menéndez:
“¿Quién vio caer a Jesús? Nadie lo viera, ni aún su asesino. Quedó en pie, rodeado de cañas insurrectas, de cañas coléricas (…) Jesús no está en el cielo, sino en la tierra; no demanda oraciones, sino lucha; no quiere sacerdotes, sino compañeros; no erige iglesias, sino sindicatos. Nadie lo podrá matar”.
El ejemplo de Jesús Menéndez pervive en cada obrero del azúcar, en cada campesino. Hace 70 años pretendieron acallar su voz, pero solo lograron agigantar su figura. De su tumba se empinó el General de las Cañas para regresar victorioso, después del 1ro de enero de 1959, y decir: “Mirad, he aquí el azúcar ya sin lágrimas (…) He vuelto, no temaís. Fue largo el viaje y áspero el camino. Creció un árbol con sangre de mi herida. Canta desde él un pájaro de la vida. La mañana se anuncia con un trino”.
Su muerte fue un escalón más en estos 150 años de lucha de nuestro pueblo por la independencia. Al decir de Raúl Castro, en el aniversario 15 de su asesinato: “(…) su sangre se funde con la de los primeros luchadores contra el yugo colonial español y con la de los combatientes de la última etapa de lucha contra el dominio imperialista. Se funde con el torrente de nuestra liberación, con la sangre de nuestros mambises de 1868 y 1895, con la sangre de los rebeldes de 1953 y 1956”.
De esas raíces patrióticas bebió Jesús Menéndez Larrondo en su Encrucijada natal, un pequeño poblado del norte de la antigua provincia de Las Villas, donde había nacido el 14 de diciembre de 1911, en la finca La Palma.

NARCISO AMADOR FERNÁNDEZ RAMÍREZ
22/01/2018

No están a la venta los principios más sagrados




Rinden homenaje al líder campesino Sabino Pupo Milián en el aniversario 70 de su asesinato

Campesinos llegados desde los más intrincados parajes de esta zona agropecuaria por excelencia rindieron homenaje a Sabino Pupo Milián, uno de los principales símbolos del sector, en el aniversario 70 de su vil asesinato por secuaces de la compañía estadounidense Manatí Sugar Company.

A la conmemoración asistieron las máximas autoridades de la provincia, encabezadas por Jorge Luis Tapia Fonseca, primer secretario del Partido, e Isabel González Cárdenas, presidenta de la Asamblea del Poder Popular, junto a dirigentes de la Asociación Nacional de Agricultores Pequeños (Anap).
Temprano en la mañana, acompañaron a dos de los hijos, Gustavo y Edilberto, en la colocación de una ofrenda floral en el panteón del cementerio local que guarda los restos del líder campesino, quien antepuso siempre el honor a las patrañas de los representantes del monopolio yanqui.
Estudiantes de Secundaria Básica custodiaron, este 20 de octubre, el obelisco que marca el lugar donde fuera asesinado Sabino Pupo Milián. Foto: del autor
Luego, escoltados por 70 jinetes portando banderas cubanas, se dirigieron al obelisco erigido en el sitio donde se consumó el crimen de Sabino Pupo Milián, el 20 de octubre de 1948, por no plegarse ante aquellos que pretendían apropiarse de las tierras que cultivaban los campesinos de la demarcación.
Allí se recordó su invariable posición de principios frente a varios intentos de soborno para que abandonara la lucha: «…no existe dinero para comprar la vergüenza de un campesino», les respondió tajante, lo que lo convirtió en un obstáculo incómodo para las apetencias de los ricos terratenientes azucareros.
Yamila Sarduy Martínez, miembro del Buró Nacional de la Anap, expresó que cuando se asiste a estos altares sagrados de la Patria siempre estremece la grandeza de quienes hicieron posible nuestro presente revolucionario, como Sabino Pupo Milián, símbolo de la dignidad que distingue al campesinado cubano.
La también diputada al Parlamento cubano aseguró que su ejemplo se mantiene vivo en Camalote y en toda Cuba, con una obra que les devolvió a los hombres y las mujeres de tierra adentro la condición de seres humanos y el derecho a trabajar y a crear en una Patria libre y soberana.
En el Consejo Popular Camalote, perteneciente al municipio de Nuevitas, se ubica hoy uno de los principales polos agropecuarios de la provincia con el aporte de 14 cooperativas, una de las cuales, la «Niceto Pérez», arribó este 20 de octubre al millón de litros de leche enviados a las plantas pasteurizadoras del territorio.

Miguel Febles Hernández | febles@granma.cu
Camalote, Camaguey.

sábado, 20 de octubre de 2018

Prostitución en Cuba y España: falsedades y doble moral




El texto de El País nos dice que la prostitución es “una sórdida oportunidad para los jóvenes cubanos que sueñan con otro futuro”, algo que sirve para “sobrevivir al presente”. ¿Se imaginan el escándalo si “El País” nos dijera que las redes y mafias a gran escala de explotación sexual –inexistentes en Cuba- son una “sórdida oportunidad” para la juventud española?

Las Bayamesas en la música y el alma de la Patria Cubana


Embajada de EEUU en La Habana organizó “reunión secreta” en apoyo a show anticubano en ONU

Sin temor a poner en peligro, por aquello de los supuestos “ataques acústicos”, la salud de sus mercenarios, este martes, la embajada de Estados Unidos en La Habana, acogió en su sede a treinta contrarrevolucionarios para que presenciaran y debatieran, vía videoconferencia, la llamada campaña “JailedforWhat?” (Encarcelado ¿para qué?) presentada por Kelley E. Currie, representante estadounidense en el Consejo Económico y Social de Naciones Unidas, en Nueva York.
Al mediodía, y luego de arribar de forma escalonada a la sede diplomática, y de que se le retiraran los teléfonos celulares, los participantes recibieron como bienvenida, en el Eagle Bar, un refrigerio consistente en un pomo de refresco per capita, pasteles, tostadas pequeñas y café. Cuota alimenticia, que según testigos aseguraron a Cambios en Cuba, no cumplió con las expectativas de algunos de los comensales, quienes compartieron criterios negativos al respecto.
Acto seguido, los contrarrevolucionarios al servicio de EEUU, participaron en la presentación de la campaña “JailedforWhat?”, así como de otros audiovisuales de intervenciones de diplomáticos estadounidenses respecto a las presuntas violaciones de los DD.HH en Cuba y la declaración del Secretario General de la OEA, Luis Almagro Lemes.
Al finalizar cada intervención de los estadounidenses en la ONU, los diplomáticos de la EmbUSA, aplaudieron con euforia, entusiasmo que no fue compartido por Anay Remón García, colaboradora del sitio contrarrevolucionario CUBANET, Jorge Enrique Rodríguez Camejo, de la plataforma digital anticubana Diario de Cuba, Omara Ruiz Urquiola y Ariel Ruiz, quienes expresaron de forma extra verbal su discrepancia con los criterios expresados.
De igual forma, debe destacarse la indisciplina mostrada por los participantes, quienes a la par de las intervenciones, generaron comentarios en voz alta por lo que los moderadores debieron restablecer el orden en varias ocasiones.
No quedó del todo claro si las “discrepancias” fueron motivadas por la ausencia del servicio de traducción durante la videoconferencia y el poco dominio del inglés de la mayor parte de los convocados.
Al culminar la transmisión, se inició el debate entre los presentes, bajo la moderación del Primer Secretario Político Económico de esa misión, Todd Henderson y de la Asistente de la Oficina de Diplomacia Pública, Mónica Fernández Salina.
Como era de esperarse en tal escenario, los contrarrevolucionarios se proyectaron en apoyo a la campaña orquestada por los Estados Unidos en la ONU contra Cuba y agradecieron el apoyo del Gobierno estadounidense a sus actividades.
La líder de las Damas de Blanco, Berta Soler Fernández, reiteró su agradecimiento al Gobierno de los EE.UU, por el “apoyo” por la libertad de los presuntos presos políticos y a la libertad de expresión en Cuba, aunque sus criterios fueron cuestionados públicamente por la vocera de CUBANET, Anay Remón García, quien en su intervención, aludió a la presunta censura en los EE.UU de los “voceros” que intentaron brindarle cobertura a la reciente visita del Presidente cubano a ese país.
Por su parte, Jorge Enrique Rodríguez Camejo, de Diario de Cuba, “reconoció” el respeto en los EE.UU a la libertad de expresión y el mercenario Antonio González-Rodiles Fernández, de Estado de SATS, informó que dedicaría un capítulo en su programa “Libertad y Punto” a lo acontecido en la actividad.
Ailer González Mena, (Estado de SATS), manifestó que el Gobierno de los EE.UU debía arreciar su política contra Cuba, mientras Remón García consideró que se debía especificar, “si el recrudecimiento que exigía era contra el pueblo o contra el Gobierno cubano, pues la población no tenía culpa”.
La controvertida aclaración obligó al Primer Secretario Político Económico y moderador del debate, Todd Henderson, a intervenir.
Como buena defensora de la “libertad de expresión”, la Asistente de la Oficina de Diplomacia Pública de la Embajada, y en este caso también moderadora, Mónica Fernández Salinas, les trasladó a los presentes que, una vez que confeccionaran los artículos para sus respectivas publicaciones, debían omitir en sus citas las palabras de Todd Henderson, así como no hacer públicos los nombres de los presentes, recalcando de ese modo el carácter “confidencial” de la actividad.
Vale destacar que en la reunión “secreta”, en la que tanto se exhaltó a “la libertad de expresión”, no fue mostrada, durante la videoconferencia, la contundente respuesta de los diplomáticos cubanos y de otros países, al show montado por el gobierno estadounidense en la ONU a solo semanas de la votación contra el bloqueo de EEUU contra Cuba en la Asamblea General.
Estados Unidos retiró en septiembre del 2017, con el pretexto de ser víctimas de falsos ataques acústicos, a la mayoría del personal de su Embajada en La Habana y mantiene paralizados desde entonces los servicios consulares para los cubanos, lo cual afecta a miles de familias en uno y otro lado del Estrecho de la Florida.
Sin embargo, en franca violación a la Convención de Viena, el reducido número de ellos que todavía permanece en esa misión diplomática, calificada por la actual administración de lugar donde “se experimentan circunstancias extraordinarias”, al parecer han vuelto a la ordinaria política, practicada durante muchos años en la antigua Oficina de Intereses (SINA) en La Habana, de alentar la subversión contra Cuba.

La lista “secreta” de los algunos de los participantes

Berta de los Ángeles Soler Fernández
María Cristina Labrada Varona
Ángel Juan Moya AcostaNancy
Alfaya Hernández
Jorge Olivera Castillo
Félix Navarro Rodríguez
Jorge Enrique Rodríguez Camejo
Oscar Elías Biscet González
Elsa Morejón Hernández
René Lázaro López Benítez
Aimé de las Mercedes Cabrera Álvarez
Hildebrando Chaviano Montes
Susana Teresa Mas Iglesias
Ángel Luis Santiesteban Prat
Iván Hernández Carrillo
René Lozano López
Martha Beatriz Roque Cabello
Antonio Enrique González Rodiles Fernández
Ailer González Mena
Héctor Fernando Maseda Gutiérrez
Manuel Silvestre Cuesta Morúa
René Jesús Gómez Manzano
Omara Isabel Ruiz Urquiola
Héctor Fernández Benítez
Amaury Pacheco del Monte
Iris Ruiz Hernández
Ariel Ruiz Urquiola
Anay Remón García

M. H. Lagarde
Cubadebate

viernes, 19 de octubre de 2018

Cuba: lo que une a Donald Trump y Reporteros sin Fronteras




A días de que la Asamblea General de Naciones Unidas vote, un año más, contra el bloqueo de EEUU a Cuba, la Casa Blanca lanza una nueva campaña de intoxicación sobre “derechos humanos” en la Isla.
Basado en un texto de Juana Carrasco Martín - Juventud Rebelde.

Fracasa espectáculo anticubano en la ONU

Estados Unidos fracasó estrepitosamente esta semana en su intento de montar un espectáculo anticubano en el salón de sesiones del Consejo Económico y Social de la ONU, ECOSOC por sus siglas en inglés. Allí presentó una nueva campaña contra Cuba con el nombre de jailed for what (preso por qué) cuyo objetivo es apoyar a los presuntos presos políticos en la isla, solo existentes en la pobre imaginación de sus organizadores. El público consistía principalmente de periodistas, pues las misiones acreditadas ante la ONU y los invitados, casi sin excepción, optaron por no acudir. Quienes sí estuvieron presentes fueron todas y todos los integrantes de la Misión de Cuba ante la ONU en Nueva York, quienes al grito de ¡Cuba sí, bloqueo no!, impidieron que fueran escuchados los discursos anticubanos. Días antes, la embajadora Anayansi Rodriguez, jefa de esa misión, envió una carta de protesta a Antonio Guterres, secretario general de la organización en la que denunciaba la convocatoria como parte de la escalada de Washington para justificar la política genocida del bloqueo. La representante cubana también hizo la denuncia en una reunión de urgencia del Movimiento de Países no Alineados, en la que 17 Estados se opusieron a la maniobra yanqui. También la realizó ante la Comisión de Asuntos Socio-Humanitarios de la Asamblea General, donde 11 países la rechazaron explícitamente.
La sesión convocada por Washington comenzó casi una hora después de lo programado. Acudieron al panel Kelley E. Currie, representante de Estados Unidos ante el ECOSOC, como orador principal Michael Kozak, jefe de la Oficina de Democracia, Derechos Humanos y Trabajo del Departamento de Estado, viejo conocido en las lides anticubanas y, particularmente familiarizado con los mercenarios de Estados Unidos en la isla, que constituían buena parte del escuálido público. Aquellos reciben cuantiosos fondos en dólares de esa, entre otras muchas dependencias y organizaciones fachada de la CIA, que los financian generosamente. Fue también uno de los oradores el despreciable Luis Almagro, secretario general de la desprestigiada OEA, a quien no le alcanza el tiempo para calumniar a Venezuela y conspirar contra su gobierno legítimo, a menos que se trate de hacerlo también contra Cuba o Nicaragua. Como es conocido, Cuba ha dicho que nunca volverá a la OEA.
La rabia de Estados Unidos ante la próxima condena abrumadora en la ONU del bloqueo contra Cuba, es de tal magnitud, que no atina a hacer nada razonable. Sus personeros han hecho últimamente una serie de declaraciones crecientemente hostiles hacia la isla y su Revolución. El problema es que Washington sabe que llueva, truene o relampaguee, el día 31 de octubre una mayoría casi absoluta de naciones se pronunciará enérgicamente una vez más contra esa medida unilateral e ilegal y pedirá su levantamiento. Como no puede impedir la reiterada humillación que recibirá, como todas sus mentiras contra Cuba quedan en evidencia, es cada vez menos original y más alocado en sus intentos de desviar la atención de esas realidades.
El último gran fiasco fue el de los supuestos ataques sónicos contra su personal diplomático en Cuba, que terminaron siendo objeto de burla por científicos de varios países, incluyendo estadounidenses. Tan obvia fue la mentira sobre las ondas sónicas que hasta en el diario español El País, nada amistoso con Cuba, apareció una columna que atribuía su autoría intelectual a Mike Pompeo desde su cargo anterior de director de la CIA, en unión del senador por Florida Marco Rubio, al que muy acertadamente califica de “una suerte de asesor palaciego en asuntos cubanos”. El autor de la columna atribuye la idea de los supuestos ataques al propósito de la administración de Trump de reducir a la mínima expresión los avances en las relaciones bilaterales, que durante el período de Obama llegaron al restablecimiento de relaciones diplomáticas y a un buen número de acuerdos y proyectos bilaterales.
El cinismo de Estados Unidos no conoce límites. Apelar al tema de los derechos humanos en su obsesión anticubana es el colmo del descaro. Cuba es un miembro activo y respetado de la ONU, signatario de la mayoría de los instrumentos internacionales de derechos humanos. Washington, enfrascado hasta hoy en sangrientas guerras de agresión, no ha firmado la mayoría de esos instrumentos, ni siquiera el de los derechos de la niñez y se retiró del Consejo de Derechos Humanos de la UNU. El genocida de Hiroshima y Nagasaky tiene más de 50 millones de pobres, su policía asesina más negros cada año, encarcela niños migrantes, posee el mayor presupuesto de guerra, discrimina salarialmente a las mujeres, fomenta ideas fascistas, como el odio, la xenofobia y superioridad de ese país y él sí tiene presos políticos. Entre otros lugares en Guantánamo, centro de tortura, en territorio ilegalmente ocupado de Cuba.

Ángel Guerra Cabrera

martes, 16 de octubre de 2018

Un Presidente 2.0… ¿para un gobierno 2.0?




Miguel Díaz Canel está en twitter. Durante el pasado congreso de la UPEC, había prometido su pronta incursión en el mundo del microblogging, y recién lo ha concretado. La noticia no puede ser más oportuna, si se tiene en cuenta que estamos a las puertas de datos móviles en los teléfonos (según los anuncios de la compañía de telecomunicaciones ETECSA), que Cuba ha crecido exponencialmente en el acceso de sus ciudadanos a las redes sociales (365%, según calculan organizaciones con sede en los propios Estados Unidos) y que, en el siglo XXI, se torna cada vez más espinoso gobernar al margen de las TICs.
La práctica del Presidente cubano cuenta con suficientes precedentes como para arrancar en firme. Probablemente el más relevante sea @chavezcandanga, introducido en abril de 2010 en Venezuela. El twitter de Chávez no solo disparó su credibilidad a través de un ejercicio permanente de democracia (aprovechando la comunicación directa entre el líder y sus seguidores), sino que generó conexiones revolucionarias entre el mundo virtual y el real, a través de estructuras específicamente creadas para atender las demandas y opiniones vertidas por los ciudadanos.
El mandatario venezolano, como la mayoría de los dirigentes progresistas de América Latina, comprendió tempranamente la imposibilidad de acometer un proyecto político de cambio sin un proyecto simbólico acompañante. Digan lo que digan, si el proceso bolivariano se hubiera circunscrito solo a aumentar los salarios y mejorar la economía de los sectores más vulnerables, difícilmente habría sobrevivido al día trágico de la muerte de Chávez. De los cerros de Caracas, de las calles tomadas por la Revolución efervescente, de los parajes perdidos de la Venezuela profunda, brotó boyante una nueva subjetividad. O, para decirlo con palabras de Antonio Gramsci, una nueva hegemonía.
Salvando los contextos, Cuba no está exenta de la pugna de sentidos descrita por Gramsci entre hegemonía y contrahegemonía, o, dicho de otro modo, entre un proyecto anticapitalista y otro parcial o totalmente subordinado a propósitos de dominación. La exposición cada vez mayor a patrones de la industria cultural globalizadora y el posicionamiento creciente del sector privado, entre otros muchos factores, deberían servir de incentivo al Estado para desatar sus potencialidades como aparato de poder dialéctico, creativo e innovador. Eso que llamamos “modernización de la administración pública”, por citar un caso, implica disponer de estructuras asequibles y ágiles, y de procesos suficientemente informatizados como para facilitar la relación entre el gobierno y la ciudadanía.
A juzgar por estudios internacionales –y por el sentido común que emerge de la práctica cotidiana- la Isla tiene, en este como en otros temas, el desafío de desbrozar obstáculos aceleradamente. Una encuesta anual de Naciones Unidas sitúa a Cuba entre los países con índice medio de progreso en gobierno electrónico (entre 0.25 y 0.50, de un promedio global de 0.55). Curiosamente, muchos países de América Latina –incluidos algunos del Caribe como Barbados y República Dominicana- muestran ya un índice alto al respecto, mientras que otros como Uruguay exhiben prácticas comparables a las de los países más industrializados.
Ya se sabe los efectos nefastos que sobre la infraestructura criolla ha dejado el cerco económico y tecnológico proveniente de los Estados Unidos en los últimos 60 años. Pero hablo también del salto cultural que debiéramos proponernos para cuando la tecnología inunde nuestras vidas. En el ámbito del gobierno electrónico –o gobierno abierto, como algunos prefieren llamarlo- cambiar la mentalidad implica entender que la sociedad red, para ser funcional, depende naturalmente del acceso a la información, la transparencia, y una cultura de gestión articulada del conocimiento.
Claro que, para llegar hasta allí, harían falta puntos de partida básicos. Que todas las organizaciones relevantes, por ejemplo, dispusieran de sitios web para hacer públicos sus indicadores de desarrollo y resultados. Que las estructuras del Poder Popular estuvieran interconectadas a todos los niveles. Que la totalidad de los delegados hiciera uso de herramientas tan elementales como el correo electrónico, o los foros de discusión, o las propias redes sociales.
Necesitamos servidores públicos con sensibilidad y cultura política suficientes como para responder sin ruborizarse, valiéndose de las TICs, a las inquietudes del pueblo. Si queremos genuinamente hacer valer el concepto del control popular –contenido en los lineamientos de la política económica y social, las bases del modelo de desarrollo y, más recientemente, en el proyecto de Reforma constitucional- hay que aguzar el oído frente a la voz de la gente, naturalizar sus interpelaciones, y capitalizar sus reclamos en función del objetivo de construir un país mejor. Ese camino no solo apunta a fortalecer las estrategias-nación de gobierno electrónico, sino también –y tan importante como lo anterior- a poner en práctica modos de hacer política contemporáneos, osados y previsiblemente más participativos.
Por lo pronto, Díaz Canel está en twitter. Y, lo quiera o no, ha dado un toque de diana para los más rezagados en el ejercicio de la política 2.0. Bueno para los ciudadanos –que accederemos más fácilmente al Presidente de Cuba- y bueno para el gobierno, compelido a implementar una agenda digital cada día más activa, a tono con el movimiento de informatización que está sacudiendo, por fin, a la sociedad cubana.

Raul Garcés. Doctor en Comunicación y Decano de la Facultad de Comunicación de la Universidad de La Habana.

lunes, 15 de octubre de 2018

La patria es… La Demajagua




Los restos del ingenio donde Carlos Manuel de Céspedes dio la libertad a sus esclavos y a Cuba su primer acto como nación dispuesta a todo por la independencia, sirven de presentación y motivan el análisis de los historiadores invitados a la Mesa Redonda.

sábado, 13 de octubre de 2018

Esto es América




Con un toque de humor emprenderemos el viaje por #LaPupilaTv. Esta vez con Judah Friedlander, el polémico y excelente cómico norteamaricano como cómplice de honor

jueves, 11 de octubre de 2018

¿Qué crisis será televisada: la de Venezuela o la de Argentina?




La pobreza, el desempleo, la inflación y las protestas en Argentina no pasan de generar frías informaciones en los diarios de referencia, sin el menor análisis crítico sobre la política neoliberal de Mauricio Macri. Porque, para condenar a gobiernos por las consecuencias no de su política, sino de las sanciones impuestas por los matones que mandan en el mundo ya tenemos… a los de Cuba y Venezuela.

Tras 150 años, digo Patria y sigo hablando para ti




Somos prehistoria que tendrá el futuro,
somos los anales remotos del hombre.
Estos años son el pasado del cielo;
estos años son cierta agilidad
con que el sol te dibuja en el porvenir…
Desde los versos de Silvio Rodríguez, nos encontramos en este punto exacto de la historia patria para emprender un nuevo viaje en la vida con La Pupila Asombrada

miércoles, 10 de octubre de 2018

Acto político por el 150 aniversario del inicio de las Luchas Independentistas en Cuba




150 del inicio de las Luchas Independentistas presidida por el Primer Secretario del Partido Comunista de Cuba, Raúl Castro Ruz, y el Presidente de los Consejos de Estado y de Ministros, Miguel Díaz-Canel Bermúdez.
Discurso de Miguel Díaz-Canel Bermúdez

Guevara como mito




Nota de edición: Ayer [9 de octubre de 2018] hace 51 años asesinaron al Che [1], un hombre nuevo en un mundo todavía viejo. Su lucha tuvo sentido ayer, hoy y para siempre. Guevara era un comunista marxista, un revolucionario laico. Fernández Buey reflexiona sobre su conversión en un mito.

I

Ni que decir tiene que Ernesto Guevara no se consideraba un mito. Tampoco le habría gustado que la gente hablara de él con esa palabra. Si se le hubiera preguntado al respecto probablemente habría contestado como Brecht acerca de las lápidas: “No necesito lápida, pero/ si vosotros necesitáis ponerme una/ desearía que en ella se leyera: /Hizo propuestas. Nosotros/ las aceptamos. /Una inscripción así/nos honraría a todos.” O tal vez habría dicho algo parecido a lo que decía hace poco Rossana Rossanda al ponerse a escribir sus recuerdos de comunista del siglo XX: “Los mitos son una proyección ajena con la que no tengo nada que ver. No estoy honrosamente clavada en una lápida, fuera del mundo y del tiempo. Sigo metida tanto en el uno como en el otro”. Bastaría con cambiar los tiempos de los verbos.
Nadie en su sano juicio pretende ser un mito o convertirse en mito. Y de la vida y la obra de Guevara se podrán decir muchas cosas, a favor o en contra, pero no se podrá decir que el hombre no estuviera en su sano juicio. Lo que él quería dar de sí o dejar a los otros en herencia lo dejó dicho en un poema que escribió a Aleida Mach desde Bolivia y que tituló “Contra viento y marea”. Dice así:
Este poema (contra viento y marea) llevará mi firma. // Te doy seis sílabas sonoras,// una mirada que siempre lleva (como un pájaro herido) ternura, // una ansiedad de agua tibia y profunda, // una oficina oscura donde la única luz es la de estos versos míos, // un dedal muy usado para tus noches aburridas, // una fotografía de nuestros hijos. // La bala más hermosa de esta pistola que siempre me acompaña, // la memoria imborrable (siempre latente y profunda) de los niños // que, un día, tú y yo concebimos, // y el pedazo de vida que me resta, // esto lo doy (convencido y feliz) a la Revolución. // Nada que pueda unirnos tendrá mayor poder.

II

La creación de mitos es, como se sabe, cosa del pensamiento religioso, prefilosófico, preilustrado. Guevara era un comunista marxista, un revolucionario laico. Y en principio el comunista marxista, el revolucionario laico, no necesita mitos. Se da a los otros, a los próximos, a los de abajo por los que lucha, con la fuerte convicción de que la revolución liberadora es inevitable y de que él mismo es parte de la revolución en marcha. No espera nada de los suspiros religiosos de la criatura oprimida. Lo espera todo de la razón apasionada de quienes quieren emanciparse y, a lo sumo, se piensa a sí mismo como parte de la chispa que producirá el incendio que cambiará el mundo. Busca la coherencia entre el decir y el hacer en el plano individual y en el plano colectivo.
Pero dicho eso, también sabemos: la revolución no es, no ha sido, no será pura racionalidad. Es pasión razonada o razón apasionada. Y en la medida en que la pasión es parte esencial de la actividad revolucionaria el comunismo marxista, como toda tradición emancipatoria, ha tenido también una dimensión que enlaza con la del pensamiento religioso, prefilosófico y preilustrado. No se puede negar eso. Por muy racional que haya sido el pensamiento de los clásicos de la tradición comunista marxista y por mucho que éstos se hayan negado de la manera más explícita a ser convertidos en mito, lo cierto es que, en unos casos más y en otros menos, lo han acabado siendo. La identificación comunitaria, por abajo, con los padres fundadores de una tradición emancipatoria lleva a eso. Hasta es posible que la tendencia a la creación de mitos, también en el mundo moderno y post-ilustrado, tenga que verse como prolongación de una de las “ilusiones naturales” de los humanos de las que no podemos prescindir. Algo así intuyó ya Sorel (y con Sorel, el joven Gramsci).
Si hubiera que hacer teoría del mito comunista esto que estoy esbozando aquí se podría formular así: independientemente de su intención racionalista e ilustrada (basta con pensar en aquello, tan repetido, del paso del socialismo utópico al socialismo científico), toda tradición que incluye praxis emancipatoria de los de abajo acaba incorporando en su desarrollo una dimensión para-religiosa que impulsa a la creación de mitos. Por eso también el revolucionario comunista marxista ha tenido (y sigue teniendo) “santos” (por laicos que éstos hayan sido) de su devoción. Y, vista la cosa con la distancia que da el tiempo transcurrido, se podría añadir, para que no haya lugar a dudas, que esto no es un hecho histórico determinado sólo, como a veces se ha dicho, por el “atraso” (económico, cultural, etc.) del lugar, país o circunstancia en que cuajan las ideas. Pues también la posmoderna crítica de todos los grandes relatos, que se presenta a sí misma con ínfulas desmitificadoreas, parece abocada a construir sus propios mitos.

III

Desde esta perspectiva nada tiene de extraño, por tanto, la mitificación de Che Guevara, el cual, por lo que había hecho durante la revolución cubana, era ya algo así como una leyenda antes de su muerte. La creación del mito Guevara tiene particularmente que ver, como se sabe, con dos fotografías: la que se tomó inmediatamente después de su muerte, ya cadáver; y la que le hizo Korda en La Habana.
De la primera se ha dicho muchas veces que recuerda tanto a la imagen del Cristo yacente de Andrea Mantegna, el pintor de Quatrocento italiano, que remite inmediatamente a lo que toda persona familiarizada con la tradición cristiana conoce: la idea de la resurrección del salvador. Y no es casual que eso mismo haya estado tan presente en tantas y tantas celebraciones conmemorativas del día de la muerte de Guevara: “Che vivo, como nunca te quisieron”, decía una pintada en Cochabamba, muchas veces repetida también. Por supuesto que, para los amigos de la revolución social, este estar vivo del guerrillero revolucionario no puede ser la resurrección real del otro, en la que creen los cristianos que tienen fe. Pero la diferencia es poco relevante en la creación del mito (que, por lo que se sabe ahora, es seguramente un mito precristiano). Lo importante es el estar vivo del personaje en el imaginario precisamente en la medida en que esto remite a la vigencia del ideal que el personaje representó.
Sobre la otra foto, la que más ha contribuido a la conversión de Guevara en mito, la foto tomada por Alberto Díaz (Korda) el 5 de marzo de 1960, cuando Guevara tenía 31 años, se ha escrito tanto que me puedo ahorrar el comentario ahora. Todo el mundo la recuerda. Es el Che vivo en su mejor momento, la mejor de las imágenes posibles del revolucionario. Ya era tan buena en el momento en que, gracias a Feltrinelli, se hizo pública por vez primera, siete años después de la muerte del Che, que ni siquiera han hecho falta las técnicas de la manipulación informática para mejorarla. Todas las demás fotos conocidas del Ché remiten a ella, e incluso las fotos que hemos conocido muchos años después, en alguna de las cuales se ve a Guevara calvo y ridículamente disfrazado o roto ya definitivamente por la enfermedad y las penalidades, nos hacen pensar, por comparación, en la apostura del personaje que retrató Korda, en aquellos ojos suyos, en la profundidad de su mirada atenta.
Algunos hemos tenido otras fotos de otros revolucionarios colgando de las paredes de nuestros cuartos y a veces compitiendo allí con la foto de Guevara. Ninguna es comparable. Y cuando uno ve las fotos de actos conmemorativos, de ayer o de hoy, presididos por el póster con aquella imagen del Che, fotos en las que se ve en primer plano a personajes que merecen nuestra admiración y nuestro respeto, en lo primero en que suele fijarse, de todas formas, es en la prestancia del personaje del fondo; hasta el punto de que, por lo general, ante fotos así tendemos a pensar enseguida si lo que habrán dijo estos otros personajes que hoy se sientan a la mesa conmemorativa estará en consonancia con lo que fue e hizo aquél.
Esto es lo que habitualmente sienten las personas que siguen apreciando sus ideales, viejos o jóvenes.

IV

Pero no hablemos sólo de los amigos de la revolución social. Luego están los otros, los jóvenes y no tan jóvenes que en todo el mundo han tenido o tienen aquella misma imagen en sus cuartos o que la lucen en sus camisetas, chapas e iconos sin haber leído nunca nada de Guevara, sin tener más que una vaga idea de quién fue o simplemente porque también esa imagen es un objeto de consumo. Como eso también existe, ha habido y hay polémica sobre la conversión del Che en mito. Y es ahí, en la identificación con el mero objeto de consumo, donde surge el problema de la apropiación.
Personalmente creo que no hay que rasgarse las vestiduras ante la apropiación de la imagen del Che por jóvenes apolíticos (suponiendo que lo sean) que combinan su chapa o su póster con la chapa o el póster del cantante o la cantante de moda. Esa combinación forma parte de una subcultura juvenil extendidísima y generalmente ajena a valoraciones políticas, aunque no necesariamente a valoraciones estéticas o relacionadas con la cuestión del gusto. Tiene escaso sentido, en mi opinión, exigir moralísticamente coherencia a quien no sabe ni sospecha con qué tienen que concordar los propios actos o actuaciones.
Más sentido tiene, en cambio, la crítica a la apropiación de la imagen del Che con una finalidad mercantil, contraria además a todo lo que él defendió, o sea, la crítica a las empresas que hacen o pretenden hacer negocio con una imagen que saben que vende entre los jóvenes consumidores. Y en este sentido me parece tan interesante como aleccionadora la batalla jurídica que Korda y el gobierno cubano emprendieron en su momento contra la apropiación de la célebre foto por una marca de vodka.
Interesante y aleccionadora, digo, porque ahí, en esa batalla jurídica, sí estaba implicada una cuestión político-cultural de importancia. Tanto más cuanto que, en los últimos tiempos, las multinacionales del consumo capitalista han hecho habitualmente un uso tan mercantil como insultante de iconos robados a las culturas y movimientos emancipatorios o de resistencia. El propio Korda dejó claro, durante aquella batalla jurídica, de qué derechos de autor se estaba hablando, a qué se oponía y a qué no: “Como defensor de los ideales por los que el Che Guevara murió, no me opongo a la reproducción de la imagen para la difusión de su memoria y de la causa de la justicia social en el mundo”.
Ese es un caso, por tanto, y hablando con propiedad, de apropiación indebida no sólo desde el punto de vista jurídico sino también desde el punto de vista moral. El que la crítica a la manipulación capitalista de palabras y símbolos de la izquierda revolucionaria sea casi tan antigua como la manipulación misma no quita justicia a la crítica ni implica que, por antigua, haya que dejar de hacerla, como postulan a veces los cínicos de hoy. Al contrario: cuando lo viejo no acaba de morir y lo nuevo no acaba de nacer, repetir y repetirse suele más novedoso que ciscarse en la repetición de lo olvidado o lo ignorado.

V

Para valorar lo que representa esa batalla contra el uso indebido de la imagen o del icono, incluso en el plano político, basta con comparar. Podemos poner a un lado esta batalla que digo contra el uso indebido de la imagen del Ché por la marca de vodka y al otro el uso consentido de la imagen del artífice de la Perestroika, Gorbachov, por tal o cual anunciante fuera de vodka o de automóviles. Con todos los respetos que desde el punto de vista político nos haya merecido en su momento el intento de Gorbachov por dignificar el socialismo en la URSS, parece evidente que su consentimiento en esto no sólo contribuye a la destrucción de otro mito (en el caso de que éste haya llegado a crearse) sino a la trivialización definitiva del socialismo mismo.
Moralmente, la cosa está clara. De la comparación que estoy proponiendo sale la confirmación a posteriori de algo que escribió el poeta salvadoreño Roque Dalton no mucho después de la muerte de Guevara: “La guerrilla es lo único limpio que queda en el mundo”. Desde ahí, o sea, desde este punto de vista aún pre-político, se comprende la persistencia del mito y se comprende incluso la paradoja de que el mito revolucionario comunista haya cuajado entre jóvenes que no lo son ni quieren serlo ni sueñan en ello.
Pero políticamente, la cosa es, desde luego, más complicada. Primero por la paradoja trágica que mató al poeta que escribió la frase: asesinado por una parte de la guerrilla en la que él estaba, y asesinado además, según todos los indicios, por orden de alguien que luego iba a abominar de la guerrilla. Y segundo, porque tampoco la apropiación de la imagen del Ché por otras guerrillas que vinieron después de su muerte, algunas de las cuales han pervivido hasta hoy, es agua clara. Hubo un momento, ya bastante lejano, en que el vínculo, comprobado, entre guerrilla y narcotráfico, obligaba a considerar como mínimo dudosa la drástica afirmación del poeta Roque Dalton, tan inspirada por el recuerdo de Guevara.
Así las cosas, creo que se podría concluir en este punto que de todas las apropiaciones de Guevara como mito que se han producido en estos cuarenta años la menos mala, la menos indebida, ha sido la que viene haciendo desde entonces el gobierno de Cuba. Y esto, a pesar de las discrepancias, sobre las que tanto se ha insistido en ensayos y biografías, entre Castro y Guevara. Pues estas discrepancias (sobre el papel de la Unión Soviética en la construcción del socialismo, sobre los incentivos materiales y espirituales en la planificación económica o sobre la táctica a seguir en los procesos revolucionarios de la época), vistas con perspectiva histórica, apenas fueron nada si se las compara con lo que fue la crítica del Ché a las instituciones y corporaciones capitalistas, colonialistas e imperialistas que luego, con los años, han tratado de sacar beneficio del mito. Y son muy poca cosa también, si las compara con la crítica del Ché a las alienaciones, despolitizaciones y manipulaciones que la misma sociedad capitalista genera entre los jóvenes.

VI

Nuestra época, la época que estamos viviendo ahora, se distingue precisamente por la pretensión de desmitificar. Esta pretensión ha dado muchas veces en un exceso: romper todos los espejos en los que mirarnos para ser mejores. El exceso queda de manifiesto, en este caso, cuando nos damos cuenta de que, al final, presuntamente rotos todos los espejos, aún nos queda uno: el de la “mala” del cuento de Blancanieves, el “espejito, espejito” que nos repite, porque nosotros ponemos en él las palabras, que somos los más guapos, los más hermosos. Sintomáticamente, una época que dice querer romper todos los espejos, acaba quedándose en el narcisismo y en el infantilismo.
Pues bien, una de las cosas más notables de las que están ocurriendo en esta época de desmitificaciones es precisamente que, cuarenta años después de su muerte, el mito Guevara sale reforzado, agrandado como ningún otro. De todos nuestros mitos de los años sesenta (Mao, Ho Chi Minh, Ben Bella, Fidel Castro, Giap, Cohn Bendit, Rudi Dutschke…), Guevara, es, sin ninguna duda, el que mejor se ha mantenido, el que sigue suscitando hoy más adhesiones entre jóvenes y viejos.
Creo que puede decirse incluso que los libros publicados en estos últimos años, con motivo de las conmemoraciones de la muerte del Che, están contribuyendo a enaltecer su leyenda. Estoy pensando, por ejemplo, en el libro del escritor mexicano Paco Ignacio Taibo II, en el del catedrático y corresponsal del diario “Le Monde” en Chile, Pierre Kalfon, (Una leyenda de nuestro siglo), en el del periodista norteamericano Jon Lee Anderson (Una vida revolucionaria) e incluso en el de Jorge Castañeda (La vida en rojo).
Ninguno de esos libros es una hagiografía de Guevara; ninguno de sus autores se caracteriza por la intención de escribir una vida de santos para uso de devotos, una biografía de aquellas en que se presenta al héroe biografiado, como decía Unamuno de las hagiografías cristianas, absteniéndose de mamar los primeros viernes ya en la más tierna infancia. Al contrario: estos son libros gruesos, que no se pueden leer de un tirón, escritos con espíritu analítico y crítico; que entran sin beatería en los detalles más controvertidos y oscuros de la vida de Guevara; que aportan datos nuevos, desconocidos hasta hace muy poco no sólo por el gran público sino también por los guevaristas de ayer. Libros que se basan en testimonios y entrevistas de y con personas que trataron al Che en los momentos decisivos de su vida: en Argentina, en Guatemala, en México, en Cuba, en el Congo, en Bolivia. Libros escritos por autores que no siempre comparten los ideales del Che o que tienen muchas objeciones que hacer a la revolución cubana.
Siempre que se entra en el detalle, analítico y crítico, de la vida de los hombres que han sido leyenda, ésta, la leyenda heredada, se complica. Y tampoco hay duda de que el Che que ahora conocemos es otro Che, un Guevara muy distinto del que apenas entrevimos hace cuarenta años cuando leíamos algunos de sus escritos más teóricos sobre la guerra de guerrillas, sus opiniones sobre el socialismo después del conflicto chino-soviético o las primeras ediciones del Diario de Bolivia. Esto ha sido subrayado por Paco Ignacio Taibo II. Y con razón.
Pues bien: cuando uno acaba de leer estos libros o las memorias de los que fueron compañeros del Che, más allá de las dudas sobre tales o cuales detalles y por encima de las preferencias políticas de sus autores (que son, a pesar del esfuerzo historiográfico, muy evidentes), queda la impresión de que, a pesar del afán desmitificador, perviven el mito y la leyenda que hicieron de Guevara el personaje más admirado por los universitarios norteamericanos y europeos del 68. El Che que aparece en esas páginas sigue siendo un ejemplo de revolucionario que, incluso en su estoicismo o en el fatalismo de las horas malas, o justamente por eso mismo, nos conmueve, nos sigue conmoviendo. Conmueve, quiero decir, a todos aquellos que hoy en día no quieren reconciliarse con la realidad de este mundo y desean arrimar el hombro en la lucha en favor de los que menos tienen, de los desheredados, de los excluidos, de los humillados y ofendidos por los poderosos de nuestra época.

VII

No querría acabar sin hacer referencia a la controversia que se produjo con motivo de las conmemoraciones del cuarenta aniversario de la muerte de Guevara, controversia suscitada por una nota editorial del diario El País, titulada “Caudillo Guevara”, que salió el 10 de octubre del año pasado.
Dije entonces y repito ahora que no hacía falta haber sido guevarista para considerar aquella intervención un insulto a la inteligencia y a la sensibilidad, un ejemplo más del tipo de discurso “autorizado por la policía y vedado por la lógica”, que decía Marx; que era de una ignorancia supina atribuir en exclusiva al romanticismo europeo el prejuicio de que entregar la vida por las ideas es digno de admiración y elogio; que es sectario denominar muerte al asesinato de Guevara en La Higuera y encima atribuirle el propósito de dotar al crimen de un sentido trascendente; que es una manipulación incalificable identificar lo que hizo el internacionalista Guevara con movimientos terroristas, nacionalistas o yihadistas de ahora; que es un infundio presentar la vida y la acción de Guevara y de sus seguidores como mera coartada para un autoritarismo de signo contrario; que es absurdo presentar a Guevara como puesta al día del caudillismo latino-americano; y que es falso que hoy ya sólo se conmemore la muerte de Guevara en Cuba, Venezuela o Bolivia.
Tengo que añadir ahora que aquel editorial inauguraba un cambio de fase en la consideración de Guevara. Hace once años los ideólogos del neoliberalismo y del social-liberalismo todavía preferían algo así como una aproximación historicista para acabar con el mito Guevara; preferían la desmitificación pensando que las ideas y el hacer de Guevara eran, al fin y al cabo, cosas de un pasado definitivamente superado; y preferían reírse o sonreírse de que el mito aún siguiera presente entre los jóvenes. Pero no parecía preocuparles.
Como todo el mundo sabe, en los años transcurridos desde entonces han pasado algunas cosas importantes en América Latina (y no sólo en Venezuela y en Bolivia). Y así, con las transformaciones en curso, la frase Guevara vivo toma otra dimensión, tiene otra connotación. Vuelve a hablarse allí de socialismo. Y aquí molesta y preocupa. El que se esté vinculando el nombre de Guevara al socialismo del siglo XXI es ya un peligro para el mantenimiento del privilegio de los mandamases. Aquí y allí. Por ello, para los ideólogos del gran poder, ya no se trata sólo de desmitificar al personaje, de mostrar sus contradicciones y debilidades, que las tuvo, como todo hijo de vecino, sino de tergiversar lo que hizo y de manipular sus ideas y sus actos abiertamente, para presentarle como antecedente de lo que llaman “caudillismo”, “populismo” y “terrorismo” los mismos que aún tienen en la memoria a su Caudillo, que denominan “popular” a su partido conservador y que apoyan abiertamente el terrorismo de estado allí donde éste actúa.
Ahí tenéis un motivo más para valorar en su justa medida lo que dijo e hizo Guevara y para desconfiar, de paso, de los desmitificadores que mitifican la ideología propia por el procedimiento de desmitificar las de los otros. Mientras eso siga existiendo, o cuando se reduplica, como hoy, la primera palabra del discurso del pensamiento laico, racionalista e ilustrado, que con razón se siente molesto con la conversión de Guevara en mito, tendrá que ser esta: primero leerlo y estudiarlo; luego hablamos. Y, por supuesto, comparamos.

Francisco Fernández Buey
El Viejo Topo

Nota de rebelión:

El que fuera maestro, compañero y amigo de FFB, Manuel Sacristán, escribió el siguiente texto tras el asesinato de Ernesto Guevara (“En memoria de Ernesto Che Guevara”, Nous Horitzons 16, 1er trim, 1969, p. 39)

martes, 9 de octubre de 2018

En La Higuera, un 9 de octubre, asesinaron al Che




La tarde del 9 de octubre, el cuerpo del Che Guevara fue llevado en helicóptero a Vallegrande y colocado en el lavadero del hospital Nuestro Señor de Malta, donde fue exhibido públicamente hasta el día siguiente.

El 7 de octubre de 1967 escribió el Che las últimas líneas en su diario. Al día siguiente, a las 13 horas, en una estrecha quebrada, el reducido grupo de hombres que componían ya el destacamento, esperaban la noche para romper el cerco, cuando una numerosa tropa enemiga hizo contacto con ellos y fueron hechos presos. Al día siguiente, el gobierno de Bolivia ordenó su fusilamiento sin juicio previo
Los prisioneros, fueron trasladados al pueblo de Higueras, donde permanecieron con vida alrededor de 24 horas. El Che se negó a discutir una sola palabra con sus captores. Mientras, en La Paz, reunidos Barrientos, Ovando y otros altos jefes militares, tomaron la decisión de asesinarlo. Todo parece que la Cia estaba presente en el lugar del crimen. El mayor Miguel Ayoroa y el coronel Andrés Selnich, rangers entrenados por los yanquis, instruyeron al suboficial Mario Terán para que procediera al asesinato. Cuando éste, completamente embriagado, penetró en el recinto, el Che, que había escuchado los disparos con los que acababan con dos guerrilleros, viendo que el verdugo vacilaba le dijo con entereza: “¡Dispare! ¡No tenga miedo!”
Tuve la fortuna de mantener una entrañable relación, hasta su muerte, con Hilda Beatriz Guevara Gadea (1956-1995), la hija mayor del Che y entre ron y ron, conversar y escuchar sus recuerdos sobre su padre. Contaba Hildita que el Che, como ella siempre le mencionaba, "era un padre muy preocupado por el bienestar de sus hijos, no en el sentido material, sino de que fuéramos niños alegres, contentos, que disfrutáramos de la vida y a la vez nos formáramos como nuevas personas". El Che quería que sus hijos fueran niños iguales a los demás, con sus ocurrencias, sus travesuras, pero disciplinados. "Siempre nos inculcó que estudiáramos, que ante todo había que superarse, porque sin conocimiento no se podía hacer nada, por ser la base del dominio de la naturaleza". Tuve en mis manos la última carta que el Che escribió a su hija el 15 de febrero de 1966 y lo recuerdo con emoción.
"Un hombre que me dio pena, estaba sucio, herido, desmoralizado...". Así describía a Ernesto Guevara el capitán del ejército boliviano que lo capturó. El 9 de octubre por la mañana el gobierno de Bolivia anunció que Ernesto Guevara había muerto en combate el día anterior. La tarde del 9 de octubre, el cuerpo del Che Guevara fue llevado en helicóptero a Vallegrande y colocado en el lavadero del hospital Nuestro Señor de Malta, donde fue exhibido públicamente hasta el día siguiente. En la noche del 10, cortaron las manos al cadáver para conservarlas como prueba de su muerte. Se ordenó la cremación, que no fue posible por carecer de los medios adecuados. Su cadáver fue enterrado en la madrugada del 11, en una fosa con otros seis guerrilleros.
En junio de 1997 se produjo un cambio de poder en Bolivia, que junto con las presiones internacionales, favoreció la búsqueda de los restos de los guerrilleros. El hallazgo se produjo treinta años después, el 28 de junio de 1997 . Un equipo de científicos cubanos encontró, en una fosa común situada en la pista auxiliar del aeropuerto de Valle Grande, los restos óseos del Che y los de sus seis hombres: (Alberto Fernández Montes de Oca "Pacho", René Martínez Tamayo "Arturo", Orlando Pantoja Tamayo "Olo", Aniceto Reinaga "Aniceto", Simeón Cuba "Willy") y Juan Pablo Chang "El Chino".
Ernesto Guevara, nació en Argentina, en el seno de una familia acomodada. Estudió la carrera de medicina. Su compromiso político le llevó por otros derroteros y se convirtió en compañero de Fidel Castro. Participó en la revolución cubana, que propició la caída del dictador Fulgencio Batista, títere de Estados Unidos, que tenía en la isla su feudo de mafia y corrupción. En el gobierno, dirigió el Ministerio de Industria y el Banco Nacional. Su vocación le hizo participar en otros movimientos de liberación e intervino en acciones guerrilleras en el Congo y Bolivia. Su ejecución en este país, tras meses de acoso por parte del Gobierno y de la CIA, acrecentó su leyenda. Entregó su vida a la lucha contra el imperialismo y la dictadura, convirtiéndose en el máximo mito revolucionario del siglo XX. Fue un icono de la juventud del Mayo del 68 y símbolo de unos ideales de libertad y justicia que juzgó más valiosos que su propia vida.
El Che escribía en su diario el 6 de Octubre : "Las exploraciones demostraron que teníamos una casa muy cerca pero también que, en una quebrada más lejana, había agua. Hacia allí nos dirigimos y cocinamos todo el día bajo una gran laja que servía de techo, a pesar que yo no pasé el día tranquilo, pues nos aproximamos a pleno sol por lugares algo poblados y quedamos en un hoyo. Como la comida se retrasó, decidimos salir por la madrugada hasta un afluente cercano a este arroyito y de allí hacer una exploración más exhaustiva para determinar el rumbo futuro. La radio chilena informó de una noticia censurada que indica que hay 1.800 hombres en la zona buscándonos."
Día 7 de Octubre . Ultima página del diario "Se cumplieron los 11 meses de nuestra inauguración guerrillera sin complicaciones, bucólicamente; hasta las 12.30 hora en que una vieja, pastoreando sus chivas entró en el cañón en que habíamos acampado y hubo que apresarla. La mujer no ha dado ninguna noticia fidedigna sobre los soldados, contestando a todo que no sabe. Sólo dio información sobre los caminos; de resultados del informe de la vieja se desprende que estamos aproximadamente a una legua de Higueras y otra de Jagüey y unas 2 de Pucará. Salimos los 17 con una luna muy pequeña y la marcha fue muy fatigosa y dejando mucho rastro por el cañón donde estábamos, que no tiene casas cerca, pero sí sembradíos de papa regados por acequias del mismo arroyo. A las 2 paramos a descansar, pues ya era inútil seguir avanzando".
Mientras el Che se encontraba prisionero nada se hizo hasta que el presidente boliviano Barrientos dio la orden de su ejecución directa y sin juicio. El Che moría fusilado con una ráfaga de disparos en el pecho, para corroborar la versión de su muerte en combate.
"Aquí se queda la clara, / la entrañable transparencia, / de tu querida presencia, / Comandante Che Guevara» (Versos de Carlos Puebla)
Ernesto Guevara de la Serna; universalmente conocido como El Che; combatiente revolucionario, estadista, escritor y médico argentino-cubano. Su vida, conducta y su pensamiento se ha convertido en paradigma de millones de hombres y mujeres en todo el mundo. "Hasta la victoria siempre".

Víctor Arrogante
Nueva Tribuna

lunes, 8 de octubre de 2018

Agano, el soldado no. 37 del Che Guevara en el Congo

“Quisiera dejar aquí los nombres de aquellos compañeros en los cuales sentí siempre que me podía apoyar…”. “Espero que si algún día Fidel les plantea otra misión de esta índole, algunos sabrán responder presente.”
Che

Hoy tiene 80 años cumplidos, y su origen se remonta a un sitio rural llamado La Fama del municipio de San Luís, en Santiago de Cuba. Ahora vive en un modesto apartamento junto a su esposa. Me mira y sonríe como si sus ojos y dientes fueran estrellas en su rostro. Y ante el reclamo de las preguntas lanzadas al aire para despertar recuerdos, narra con bastante precisión y detalles los hitos de una historia personal que forma parte de una historia mayor perteneciente a la lucha de liberación de los pueblos de África y, en especial, del Congo. Fue uno de los combatientes de la guerrilla del Che en apoyo al movimiento revolucionario congolés.
Al triunfo de la revolución, el joven campesino, nacido el 22 de julio de 1938, se integró a las milicias nacionales revolucionarias y luego se inició la preparación física y militar en condiciones de muchas exigencias. Pronto quedó incorporado a las filas del Ejército Rebelde que se reorganizaba en aquellos primeros años de Revolución.
Fue así que se brindó voluntariamente junto a otros cuatro compañeros de la División 50 a la que pertenecía para cumplir una misión cuyo destino desconocía entonces. Pronto fue trasladado para una preparación militar intensiva en un paraje montañoso de la provincia de Pinar del Río, la más occidental del país. Allí constataron lo que alguien expresara en son de broma, pues nunca habían visto a tantos negros juntos.
Recuerda que Fidel les visitó en tres ocasiones, y la última fue para pedirles discreción y darles la autorización para visitar a sus familiares, residentes en todos los puntos de la geografía de Cuba. Más tarde, después de aquellas 72 horas para la despedida familiar, regresaron a La Habana para la despedida final. Como fue costumbre, Fidel les despidió en la misma casa donde se alojaban los 8 hombres, en su mayoría orientales, que integraban su grupo.
Luego ocurriría el traslado hacia el aeropuerto de La Habana y finalmente el viaje de largo tránsito hacia Moscú, después a Praga, al Cairo, Nairobi y Dar-es-Salam. En su relato intercala una mención al impresionante Kilimanjaro.
Finalmente llegan a Kigoma y pasan el lago de noche hacia el territorio del Congo, desembarcan y ascienden la empinada loma donde se ubica el campamento central y allí el Che les recibe con palabras emotivas. Les habló de la magnitud de la misión encomendada, que sería difícil y podría durar años.
En ese territorio desarrollaron las acciones diversas de la guerrilla. Labores para la subsistencia, preparación defensiva, instrucciones a las tropas angoleñas, cuidados de las dolencias físicas y de las cuitas sentimentales y los desesperos nostálgicos, incidentes y accidentes de guerra, etc. En fin, de adaptación a un medio geográfico y humano en tierra extranjera, pero compartida y asumida como hermana por un ideal y una solidaridad sin fronteras.
En Agano es dominante el recuerdo de un incidente en que se desencadenó un incendio en una choza a causa de una fosforera de su propiedad. Fue de tal magnitud el hecho, que Che le sancionó severamente. Un poco más tarde, analizando tal vez las circunstancias del hecho, Che le regaló una fosforera nueva para resarcirlo de la perdida.
Y el tiempo pasó con todos los incidentes, acontecimientos, contradicciones, desafíos, desalientos, pesares y arrojos propios de la vida guerrillera. Las circunstancias de la política internacional africana, determinaron poner fin a la misión internacionalista encabezada por el Che, que se estableciera en el Congo desde el 24 de abril hasta la madrugada del domingo 21 de noviembre de 1965.
En el viaje de retorno por el lago, el grupo de internacionalistas ocuparon sus puestos en dos embarcaciones. En una de ellas es posible distinguir a Agano en una foto, de pie en medio del grupo, en aquel momento en que se mezclaban alegrías y tristezas. Es en aquellas circunstancias que, a las 7.00 del domingo 21 de noviembre de 1965 y cerca de la orilla de Kigoma, Che les dirige unas palabras en que señala que tendrá que separarse de ellos, y les expresa entre otras cosas:
“Esta lucha que hemos librado ha sido de gran experiencia. Espero que si algún día Fidel les plantea otra misión de esta índole, algunos sabrán responder presente. Solamente se es revolucionario cuando se está dispuesto a dejar todas las comodidades para ir a otro país a luchar. Quizás nos veamos en Cuba o en otra parte del mundo.”
En su cuaderno de notas sobre su experiencia del Congo, Che hizo un resumen de sus apreciaciones sobre los integrantes de su tropa. En esas líneas expresó:
“Quisiera dejar aquí los nombres de aquellos compañeros en los cuales sentí siempre que me podía apoyar, por sus condiciones personales, su fe en la revolución y la decisión de cumplir con su deber pasara lo que pasara… Hubo seguramente más compañeros de esa categoría pero no tuve un trato íntimo con ellos y no puedo certificarlo. Es una lista incompleta, personal, muy influida por factores subjetivos, que me perdonen los que no estén en ella y piensen que eran de la misma categoría.”
Estos son los 11 nombres que encabezan la lista: Moja, Mbiti, Pombo, Azi, Mafin, Tumaini, Ishirini, Tiza, Alau, Aziri, Agano…
Agano no volvió a encontrarse con Che. Meses después de su regreso a Cuba se encontraba superándose como interno en una escuela militar. Llegaron unos compañeros solicitando, por sus nombres, a dos compañeros presentes en el aula, que habían acompañado a Che en el Congo. Después de un corto periodo, y con las instrucciones pertinentes, fueron trasladados junto a otros a un barco que finalmente zarpó hacia un largo viaje de 52 días hasta un país de África, y de allí, continuaron el periplo marítimo, hasta el lugar de destino definitivo para cumplir una misión de colaboración que duró año y medio: Zanzíbar o Costa de los Negros. Este es un archipiélago, de una superficie de 2650 km2, situado en el océano Índico y a una distancia de 25 kilómetros frente a la costa oriental de Tanzania, de la cual es una región semiautónoma. La distancia entre La Habana y Zanzíbar es de 13 514 kilómetros.
Hasta este sitio remoto de la geografía africana llegó un día la noticia de la muerte de Che en Bolivia el 9 de octubre de 1967. Así llegó entonces el dolor a Arquímedes Martínez Sauquet, el soldado No. 37, por la pérdida de quien había sido su jefe en el Congo y le había bautizado con el vocablo suajili de Agano, que significa Pacto en español, para integrarlo a la tropa. En aquel instante recordó una vez más las palabras de Che aquel 21 de noviembre de 1965 mientras se acercaban a las orillas de Kigoma. “Espero que si algún día Fidel les plantea otra misión de esta índole, algunos sabrán responder presente.” Y pensó que había cumplido con la exhortación de Che Guevara.
Fue justo en este momento que, ante la inminencia de la lluvia que pronto sería un aluvión, concluimos la conversación sabatina, mientras Arquímedes abría la puerta, y yo le veía grande en su exterior con sus 96 kilogramos de peso, los 180 centímetros de talla, su pelo cano y sus 80 años, pero también le veía y sentía mucho más grande –inmenso- en su interior. Y es que los hombres pueden crecerse en las horas de las definiciones y las pruebas que surgen en forma natural durante determinados acontecimientos históricos. Y en los que tanto los personajes célebres como los personajes comunes coinciden, se funden, son protagonistas, y forman una argamasa popular trascendente, y todos quedan ungidos por el halo de grandeza que les confirió la vida, las experiencias y los ideales compartidos.

Wilkie Delgado Correa

Che, su época, la nuestra




Acercarse a la época del Che hoy, es también acercarse al tiempo en que Fidel y el Che transitaron juntos. En nuestra ponencia ubicamos la época entre finales de la II Guerra Mundial y finales de los años sesentas.
La segunda guerra mundial, a diferencia de la primera, no solo tuvo lugar en el escenario europeo; también en África y en Asia se libraron importantes campañas militares en la que participaron los pueblos de los países colonizados. Las metrópolis coloniales se vieron obligadas a apoyarse en determinadas fuerzas que en muchas oportunidades formaban parte del movimiento de liberación nacional.
En esa guerra jugó un papel decisivo la Unión Soviética; ella llevó el mayor peso en la lucha contra el nazifascismo en Europa y sus fuerzas militares le infringieron las derrotas decisivas que llevaron a la capitulación de Alemania.
En el curso de la guerra los EE.UU. aumentaron su poderío económico y militar, al no ser afectado su territorio por los efectos de la guerra, como lo fue el de las otras potencias capitalistas. Al finalizar la guerra la producción industrial de EE.UU pasa a ser casi la mitad de la del mundo, su participación en el comercio mundial era de 47%,sus reservas de oro eran cerca del 70% de las mundiales ,su productividad era varias veces superior a la de otros países y sus Fuerzas Armadas estaban desplegadas en numerosos países capitalistas. Además poseían el monopolio de la Bomba Atómica y por último EE. UU pasa a ser el país cuya moneda nacional se convierte en divisa mundial.
En consecuencia al finalizar la segunda guerra mundial surgió una situación internacional nueva con dos rasgos importantes.
En primer lugar, la guerra tuvo dos vencedores, los EE.UU. y la URSS, cuyos objetivos políticos diferían, cada uno de ellos tenía un campo de influencia. De hecho aparece en primer plano la división del mundo en dos bloques antagónicos: el capitalista y el socialista.
En segundo lugar entra en crisis el sistema colonial del imperialismo por la lucha de las colonias por independizarse.
La emergencia de los EE.UU como potencia hegemónica capitalista se da en condiciones tales que le permiten ser el organizador y el dirigente del sistema mundial capitalista, por lo cual tienen que asumir la lucha por la no contracción del sistema, tanto por la emergencia del llamado campo socialista (los países bajo la influencia soviética) , como por las luchas por la liberación y la independencia de las colonias.
En apretada síntesis se puede decir que finalizada la Segunda guerra Mundial una ola de cambios sociales y revolucionarios recorrió el mundo y sus efectos se sintieron tanto en el centro como en la periferia del sistema capitalista. Hizo crisis el sistema colonial del imperialismo. Surgieron nuevas naciones independientes en Asia y en África como resultado de la lucha anticolonial, en ocasiones por la vía armada.
Menciono algunos jalones de ese proceso. Proclamación de la República de VietNam, Independencia de Filipinas, India, Indonesia, Birmania, Siria, Líbano. Derrota del colonialismo francés en Dien Bien Phu, triunfo del Movimiento de los Oficiales Libres en Egipto y de un movimiento militar progresista en Irak – que puso en crisis el pacto de Bagdad- , en África aparecieron las primeras naciones independientes que llevaron a declarar el año 1960 como año de África por la cantidad de Estados que alcanzaron la independencia.
En el ámbito internacional marcó pauta la Conferencia de Bandung y la aparición del neutralismo positivo y la creación de la Organización de Solidaridad de los Pueblos de Asia y África (OSPAA).
En América Latina es el tiempo de las revoluciones a medias (Costa Rica, Guatemala, Bolivia) y de los proyectos nacional populistas que se frustran (Cárdenas, Vargas, Perón), de dictaduras militares y Golpes de Estados, y también de guerrillas en Colombia (La violencia) y Perú (Hugo Blanco).
Es en ese contexto que triunfa la Revolución Cubana que tiene una proyección internacional inmediata. Cuba lanza la iniciativa de una conferencia mundial de países subdesarrollados que, aunque no se realizó, contribuyo a vincular América Latina con los procesos que tenían lugar en Asia y África. En 1961 se celebró la Primera Conferencia de Países No alineados. Cuba estuvo presente. En 1966 se celebró en La Habana la Conferencia Tricontinental en la que participaron movimientos de liberación de Asia, África y América Latina.
En los años sesentas la conflictividad social también tiene como escenario los países del centro del sistema capitalista; en los EE.UU. la lucha por los derechos civiles de la población negra que tiene su manifestación más radical en el movimiento del poder negro, que tuvo diversas expresiones, entre ellas los Panteras Negras que rompieron el mito de que solo los blancos podían tener armas. Las protestas contra la guerra en VietNam tuvieron carácter masivo,-en ellas jugaron un papel importante los estudiantes universitarios y participaron sectores de la clase media-,lo que llevó a que se introdujeran cambios en el sistema de reclutamiento para las fuerzas armadas de EE.UU.
En Europa las protestas estudiantiles estremecieron la sociedad en varios países, (Alemania, Italia), alcanzando su punto más alto en el mayo francés de 1968, una especie de segunda Comuna de París.
En América Latina se desarrollaron luchas guerrillera en varios países, entre ellos, Guatemala, Nicaragua, Colombia, Venezuela, Brasil, Uruguay, Argentina y la gesta del Che en Bolivia.
Incluso las ciencias sociales fueron impactadas por esos procesos y apareció la teoría de la Dependencia.
Objetivamente era una época de la posibilidad de la Revolución a escala internacional
Sin embargo esa ola revolucionaria internacional no alcanzó la victoria y el sistema capitalista pudo recomponerse. El análisis de los factores de ese fracaso, a mi juicio, aún está pendiente.y es necesario hacerlo, para sacar experiencias para los combates futuros.
De todas formas si quiero enunciar una línea de Cuba, de Fidel, en esa coyuntura y siempre, la lucha por la unidad del movimiento revolucionario y popular. Buscar todo lo que nos une, luchar contra todo lo que nos separa. El respeto a otras posiciones sin excluir en bloque a los que no comparten las nuestra tiene que ser una brújula del accionar de los que quieren otro mundo posible y necesario.
De esa actitud tenemos que aprender en las relaciones entre organizaciones.
Lo otro, una característica de Fidel:
No desmayar jamás, reponerse ante cada revés y continuar la lucha, analizar las causas del no éxito y buscar camino para tenerlos.

CÓMO VEMOS LA ÉPOCA ACTUAL

Vivimos un momento terhrmidoriano de la historia.
Hay avances y retrocesos, pero va quedando un sedimento que servirá para avances futuros.
La primera década del siglo XXI parecía que estaba a las puertas la segunda ola emancipatoria de América Latina, sin embargo ahora hay algunos retrocesos y ha aparecido una nueva derecha en escena.
Hay un proceso de criminalización de la izquierda y de la protesta social.
El imperialismo aprendió y ha logrado estructurar una respuesta más efectiva que combina los medios de comunicación , las redes sociales, los mensajes audiovisuales, la judicatura conservadora y los poderes económicos locales asociados a él y una gama de políticas punitivas para desarticular el movimiento popular y dificultar , cuando no derribar a los gobiernos no sumisos.
El imperialismo trabaja activamente para imponer la cultura de la banalidad. No es solo el pensamiento único, sino también el no pensar, sumergirse en el entretenimiento.
Objetivamente los E.UU. pierden terreno en la economía mundial.
Hay una sobremilitarización de los Estados Unidos, la guerra y el chantaje de la guerra, son, de hecho, el principal instrumento de política exterior, ante el surgimiento de otros centros económicos que lo ponen en jaque.

EL TOPO DE LA HISTORIA

Los movimientos sociales como actores activos antisistemicos.
El neoliberalismo a escala global conducirá a nuevas explosiones sociales y hay que prepararse para ellas.
La unidad y la lucha por la unidad de todos los perjudicados por el sistema es tarea importante, como lo es la coincidencia de acciones de distintas fuerzas políticas en escenarios concretos.
Necesidad de estudiar para actuar , investigar cuales son los cambios acaecidos en cada una de nuestras sociedades en cuanto a estructura social, dinámica de las clases, etnias y agrupaciones sociales, para encontrar los elementos que lo sumen a un proyecto de cambio del actual estado de cosas.
La búsqueda de coincidencia de acciones entre organizaciones y movimientos del Norte y del Sur es una necesidad de nuestro tiempo. Trabajemos para ello.

Una idea final:

La segunda guerra mundial comenzó realmente con la agresión fascista a la República española en 1936, con la complicidad de las potencias capitalistas, hoy es posible que la tercera guerra mundial pueda comenzar en Siria.
De hecho los Estados Unidos han logrado imponer la ideología de la “lucha contra el terrorismo” que ha ocupado el espacio ideológico de la lucha contra el comunismo, a la vez trata de crear las condiciones para una nueva guerra fría, esta vez frente a Rusia. En este objetivo tiene a Europa a remolque.
A pesar de todas las bravuconadas del actual presidente, están empantanados en Afganistán, están destruyendo ese país en una guerra aérea, aunque no pueden dejar de tener soldados en el terreno. Una guerra que lleva 17 años y que no pueden ganar ni perder.
Irak no es página pasada, no está en los titulares de prensa, han logrado imponer un gobierno ambiguo y apoderarse del petróleo de ese país, pero la situación puede estar previa a la ebullición.
En América Latina junto a la recomposición de la derecha , tienen en la manga una acción militar contra Venezuela con el pretexto de una acción humanitaria, pero esto de suceder puede desatar un avispero en el continente que en lugar de detener luchas las acelere.
De hecho la guerra, la amenaza de guerra y las sanciones económicas constituyen hoy los principales instrumentos de la política exterior del imperialismo norteamericano.
Todo esto nos lleva a plantear la necesidad de revitalizar el movimiento de partidarios de la paz y la lucha por la paz a escala internacional con movilizaciones contra el guerrerismo y contra el armamentismo. En esa dirección se pueden sumar personas de todo el espectro político.
Los tiempos que vienen serán de luchas cada vez más intensas y debemos prepararnos para ello.