miércoles, 30 de octubre de 2019

martes, 29 de octubre de 2019

Camilo Cienfuegos: La imagen del Pueblo




La Mesa Redonda rinde tributo al Héroe de Yaguajay en la emisión de este lunes 28 de octubre, que contará con testimonios de colaboradores de Camilo, recopilados por el espacio televisivo, y grabaciones inéditas de intervenciones de Camilo, atesoradas por el Instituto de Historia de Cuba

¿Por qué en Cuba no hay estallidos sociales?

Una amiga brasileña que como periodista ha estado unos días en Cuba me comentaba su asombro acerca de cómo todos los cubanos con quien habló saben quién es Bolsonaro, quién es Dilma y quién es Lula, lo que no le sucedía en otros países latinoamericanos que había visitado recientemente.
El excepcional interés con el que los cubanos siguen los acontecimientos internacionales es algo muy particular que suele pasar inadvertido para quienes vivimos en la Isla. Ahora mismo, los estallidos sociales en Haití, Chile, Panamá y Ecuador, el conflicto de poderes en Perú, las interminables represiones y asesinatos de líderes sociales en Honduras y Colombia, la ingobernabilidad heredada que obliga al gobierno de México a liberar a un narcotraficante, la prisión injusta del líder de la izquierda brasileña para impedir su segura victoria electoral y las elecciones en Bolivia y Argentina, las agresiones constantes de Estados Unidos contra Venezuela, o el Ucraniagate en que anda sumido Donald Trump, pueden ser tema de conversación en cualquier lugar de Cuba, desde una esquina donde se juega dominó a un aula universitaria.
Por supuesto, esas conversaciones no evaden las graves dificultades que atraviesa la economía cubana contra la que cada semana se dan a conocer nuevas sanciones del gobierno estadounidense, ni tampoco cualquiera de las deficiencias en los servicios con los que choca la ciudadanía, en los que el impacto del bloqueo económico se puede mezclar con la desidia burocrática y provocar molestias e insatisfacciones injustificadas. Sin embargo, esa mezcla de guerra económica con insuficiencias internas no provoca estallidos sociales y cuando el sistema -socialismo de Partido único- se ha sometido a la prueba de las urnas, como en el reciente referendo constitucional, a pesar de la intensa propaganda contra el proceso a la que cada año Estados Unidos destina decenas de millones de dólares y una bien financiada “Cuba Internet Task Force”, los resultados le son aplastatantemente favorables a la dirección revolucionaria que Washington lleva seis décadas tratando de derribar.
La explicación de la maquinaria mediática dominante es que la mezcla de la “intensa represión del régimen” y el “relajo cubano” impiden un estallido. Pero en la historia de Cuba -de la reconcentración de Weyler a la dictadura de Batista, pasando por la de Machado- ningún régimen basado en la represión logró permanecer por tiempo prolongado al frente del país, a pesar de un “relajo” en el que la corrupción era la dinámica de funcionamiento de la política y la economía a todos los niveles.
Por el contrario, si en vez de en febrero, la consulta electoral se efectuara ahora, en medio de un bloqueo recrudecido, el por ciento de aprobación superaría con creces los obtenidos entonces, y eso sería fruto, sin dudas, de la combinación de tres factores coyunturales y dos estructurales.
Coyunturales:
.El recrudecimiento de la agresividad del gobierno estadounidense fortalece el sentimiento patriótico y la unidad nacional.
Eficacia política del gobierno cubano, explicando de modo convincente la relación de las escaceses con el incremento de la agresión y el modo en que la estrategia para enfrentar las sanciones estadounidenses busca aminorar su impacto en la vida cotidiana del pueblo.
Situación internacional con visible fracaso de las políticas neoliberales y descrédito de las fórmulas de la democracia burguesa.
Estructurales:
Cultura política masiva entre los cubanos, asentada durante 60 años por la pedagogía de Fidel Castro, acerca de la naturaleza del imperialismo y del proyecto de justicia social y soberanía nacional de la Revolución.
Vínculo la dirección revolucionaria con el pueblo, renovado por el gobierno de Miguel Díaz Canel, que ha reforzado la pecepción de que el gobierno escucha al pueblo y trabaja para él.
Ningún país latinoamericano de los que ahora mismo reprime con disparos y gases la protesta social y/o viola abiertamente las reglas de la democracia formal que ellos mismos defienden ha sido sometido a la guerra económica, al financiamiento multimillonario para crear una oposición artificial y mucho menos al linchamiento mediático y académico global permanente hacia sus líderes y su proyecto político y social.
Pero a pesar de todo eso hay reconocer que hay gente insatisfecha en Cuba y muchos de esos insatisfechos se van a Miami. La acumulación de casi seis décadas de privilegios migratorios junto al desarrollo de capacidades educativas y el estado de salud propiciados por el socialismo cubano les hacen muy competitivos con respecto al resto de las comunidades no nativas, pero no los convierten en más libres: Más de un millón de cubanos en Estados Unidos sufren graves limitaciones para relacionarse con sus familias en Cuba gracias a las medidas de Trump, sin embargo no hay noticias de que eso provoque protestas allí. Tampoco leemos en ninguna parte que esa ausencia pública de desacuerdo se atribuya a la corrupción y las prácticas represivas nada democráticas que la clase dominante en la Isla hasta 1959 parece haber implantado en Miami durante su ya larga permanencia en esa ciudad, sin desdeñar el ejemplo edificante que le ha ofrecido un sistema que hoy pone a competir en corrupciones a Donald Trump y Joe Biden.

Iroel Sánchez

domingo, 27 de octubre de 2019

viernes, 25 de octubre de 2019

¿Sabían que la Ley Helms-Burton se redactó en las oficinas de Ron Bacardí?




Cubainformación TV – Basado en un texto de Randy Alonso Falcón – Cubadebate.- “Bacardí, un mal trago”, la campaña internacional de boicot al Ron Bacardí, cobra actualidad tras la aplicación total de la Ley Helms-Burton, medida aprobada por Donald Trump.

Díaz-Canel en MNOAL: "Ellos tienen la fuerza de las armas. Nosotros la fuerza de los pueblos."




Intervención del Presidente de la República, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, en la XVIII Cumbre del Movimiento de Países No Alineados que tiene lugar en Bakú, República de Azerbaiyán.

¿Por qué socialistas?

La tradición política más dilatada y arraigada en la nación cubana es la de la revolución socialista. Esa realidad tiene un valor no solo ideológico, sino también psicológico, simbólico.
El primero de enero de 1959 triunfó una revolución que se propuso cambiar radicalmente el país con la intención de alcanzar la plena independencia y soberanía nacional y toda la igualdad y justicia social posible. Las energías revolucionarias emanaban de la gigantesca deuda social que había dejado el capitalismo dependiente y su eficaz canalización la organizaba una dirección, si bien joven, inteligente, valiente y decidida a cambiar el estado de cosas.
Se inició un rápido proceso de empoderamiento popular a través del cual el pueblo trabajador tomó en sus manos las riendas del país. La revolución de enero generó un cambio cultural integral, transformó la mentalidad de la población, revaluó cabalmente la historia nacional, arrinconó al individualismo e instauró la solidaridad, recuperó para el pueblo las capacidades productivas y las riquezas del país, democratizó la educación, la salud pública, la seguridad social, amplió generosamente las oportunidades de crecimiento individual, impulsó el florecimiento universal de la cultura, pobló la geografía cubana de lugares emblemáticos, el primero de ellos la Plaza de la Revolución José Martí, sitio simbólico por excelencia de la República Socialista de Cuba.
Si bien en condiciones de equilibrio bipolar en el mundo, la revolución cubana desafió el poder hegemónico estadounidense en el hemisferio occidental del modo más radical posible y la reacción imperialista no se hizo esperar; dura hasta hoy cuando se recrudecen el bloqueo y la retórica anticubana. La contradicción entre los intereses del imperialismo estadounidense y los del pueblo cubano empeñado en mantener incólumes la soberanía, la independencia nacional y el derecho al desarrollo con justicia social refleja hoy como un una gota de agua el enfrentamiento universal entre el capitalismo tardío codicioso y depredador y el nuevo mundo que pugna por surgir.

Lo que dijo Einstein

El sabio alemán Albert Einstein en un muy conocido artículo cuyo título he tomado prestado para este, publicado en Monthly Review hace 70 años, denunció como "verdadera fuente del mal" al caos económico del capitalismo, puso al desnudo la dominación que ejerce el capital sobre la política y los medios de comunicación que emplea para conculcar los derechos políticos de la ciudadanía, denunció la competitividad descontrolada que mutila la conciencia social de los individuos lo que calificó como "el mayor mal del capitalismo" y la deformación del sistema educativo en dirección al individualismo, y concluye que el único modo de superar los graves males del sistema está en un modo socialista de organizar el metabolismo socioeconómico sin descuidar la educación de los seres humanos.
De la inteligencia de Albert Einstein es imposible dudar. Él, que apreció la sociedad desde el razonamiento científico, llamó a no sobrestimar a la ciencia y recordó que una economía planificada no es todavía "socialismo" ya que ella puede conducir a la completa esclavitud del individuo, y como buen científico llegó hasta donde su leal razonamiento le permitió y concluyó el breve, pero enjundioso ensayo preguntándose ¿Cómo es posible con una centralización de gran envergadura del poder político y económico, evitar que la burocracia llegue a ser poderosa y arrogante? ¿Cómo pueden estar protegidos los derechos del individuo y cómo asegurar un contrapeso democrático al poder de la burocracia?
Es cierto que el peligro del burocratismo no aparece solo por la implantación de la planificación socialista. El ordeno y mando y el verticalismo constituyen realidades que existen desde que la sociedad se dividió en clases, y ambos y el burocratismo se potencian en el Estado capitalista con formas más o menos abiertas de manifestarse, teniendo como principales generatrices la propiedad privada y la concentración de la riqueza: "el dueño manda".
La humanidad durante siglos se ha formado bajo el influjo de estas prácticas. El burocratismo no es un invento del socialismo aunque este, desde la cultura heredada, lo reproduce en el proceso de planificación y de adopción de las decisiones. Sería ingenuo desconocer las causas reales, objetivas, del fenómeno del burocratismo. Si no se ataca el mal desde sus raíces este se reproducirá. De ahí la validez de las preguntas que Einstein se hizo y la necesidad de cambiar la mentalidad.
El contrapeso democrático al que él se refirió no se alcanzó en los experimentos socialistas abiertos por la Revolución de Octubre, los cuales transcurrieron -hay que decirlo- en medio del conflicto Este-Oeste, la Guerra Fría, la carrera armamentista. Cualquier limitación de los derechos del individuo, cualquier abuso de poder, cualquier falta de transparencia en los asuntos públicos podían justificarse con la necesidad real de protegerse del enemigo. La ausencia de ese contrapeso democrático se reveló dramáticamente durante el colapso finisecular del socialismo en Europa del Este y aunque es elemental reconocer los avances en materia de democracia en nuestra realidad ello constituye todavía un desafío para el presente y el futuro socialista de Cuba. No en balde Raúl llamó a conquistar toda la democracia posible. Pero no es un asunto sencillo, hay mucho por aprender y también por desaprender, como recordara recientemente el respetado filósofo cubano Gilberto Valdés.
¿Qué tenemos en contra para alcanzar la plenitud democrática? Pueden enumerarse no pocos factores, pero hay que señalar entre ellos ante todo la herencia cultural negativa del ordeno y mando que existe en la humanidad desde que existen las clases sociales, los intereses egoístas, el individualismo, la todavía insuficiente cultura jurídica de la sociedad, las limitaciones en la eficacia organizativa de la economía y de la sociedad, los errores en las precauciones imprescindibles para defenderse de los golpes bajos del imperialismo, el secretismo, la incapacidad, también la escasez y el bloqueo ahora recrudecido, que obliga a complicar los mecanismos de distribución y sirve de justificación de lo mal hecho, y también el conocido y denunciado "bloqueo interno", una forma de nombrar al burocratismo.

¿Es solución la propuesta socialdemócrata?

Existe aún hoy el criterio de que la socialdemocracia es una ideología y cosmovisión que conviene más a los trabajadores pues combina exitosamente tres factores: democracia, bienestar y propiedad privada. Pero eso esconde una realidad: si persiste el predominio de la propiedad privada, persiste el capitalismo, ergo la ideología socialdemócrata es una forma de justificar el sistema capitalista, en ningún caso sería una ideología socialista, tan grande es el contrasentido: un socialismo capitalista [1].
Por el contrario, el capitalismo como sistema, hoy en su etapa globalizadora neoliberal, ha logrado mediante otro trío de factores: el consumismo, la psicología de la competencia de "winners" y "loosers" y la manipulación mediática yuxtaponer ideológicamente en la sociedad los intereses de la gran propiedad privada escondidos detrás de mitos del sistema como la integridad y pureza natural de su democracia representativa, su libertad de prensa, la imparcialidad de su justicia, el individualismo como cualidad superior de la naturaleza humana; o sea, su gran victoria ha sido la de construir una narrativa generalizada, en la que prevalecen otros mitos como el del capitalismo como fenómeno insuperable, la propiedad privada como panacea, la pobreza como responsabilidad única del individuo, etc.

El camino socialista tiene que ser socialista

La solución de la democracia socialista en nuestro país tiene que ser totalmente nueva y específicamente cubana sin desconocer la buenas prácticas universales, pero no puede tomarse prestada del modo capitalista de la política, esas son también armas melladas.
Al capitalismo no le interesan las consecuencias sociales negativas de su actuación, esas las registra como "el orden natural de las cosas". El ideal socialista contiene un principio: la sociedad tiene responsabilidad con el individuo y este con la sociedad, pero al socialismo nadie le puede sobrar, mientras que le resulta letal no tener en cuenta las consecuencias de los errores.
El debate sobre la construcción social de orientación socialista en Cuba toca dos extremos elementales: el de su viabilidad y el de su inviabilidad. Este último no suele aparecer como abiertamente no socialista, sino mimetizado en fórmulas de un pragmatismo irresponsable que sin negar de plano el socialismo, lo comprometen estratégicamente propugnando medidas puramente mercantiles.
También están presentes la inercia, el temor al cambio, la incapacidad para experimentar, la ignorancia y la mediocridad, que no pocas veces se escudan detrás de los principios ideológicos de una ideología revolucionaria, que por ser tal niega de plano tales conductas. Alguien puede pensar que es posible ubicar el desarrollo económico de Cuba en la lógica del capitalismo y suponer que ello no traerá consecuencias negativas para la existencia física y mental de la nación, que las bondades del socialismo se mantendrán.
Por más que la vida demuestra con creces lo contrario, hay quien pone un signo de igualdad en las leyes de la economía cuando predomina la propiedad privada que cuando predomina la propiedad socialista de todo el pueblo, como si los trabajadores reaccionaran del mismo modo en unas y en otras condiciones y como si el andamiaje supraestructural del sistema pudiera ser esencialmente el mismo.
Lo anterior no contradice la importancia de los emprendimientos privados como parte consustancial de todo el metabolismo socioeconómico del país, tampoco la inversión extranjera, sino que recuerda la importancia estratégica de preservar el papel decisivo del predominio de la propiedad socialista de todo el pueblo base económica del poder político socialista.
No podrá avanzarse en la construcción social de orientación socialista sin relaciones mercantiles, pero estas siempre deben estar subordinadas a los intereses generales de la sociedad y no habrá socialismo posible sin educación socialista y leyes socialistas. En el pasado, en condiciones de un escaso papel de las relaciones mercantiles era menos complicado luchar contra el individualismo y el egoísmo. En el presente, cuando crece el papel de las relaciones mercantiles, junto con su papel ordenador de las relaciones sociales, crecen la desigualdad y el afán de lucro, factores ambos que van en dirección contraria al ideal socialista, por lo que requieren de políticas públicas que los contengan.
No obstante, hay quien supone que el logro de una mentalidad socialista de productores, de una conciencia de constructor del socialismo es un asunto puramente de educación, de información y demostración teórica, y no una convicción y sentimiento que se forman en una cotidianidad socioeconómica en la que el trabajador apropia la condición de propietario colectivo a través del reconocimiento del valor de su trabajo, imprescindible para que se desarrolle en su personalidad el trabajo como un valor y de su papel real en las deicisiones.
No se trata de una fórmula imposible en la que una superestructura política impoluta administra una sociedad contaminada con el mercado donde funcionan las leyes económicas que por ser tales aseguran en este mundo profundamente desigual el éxito de la gestión y el derrame de las riquezas mediante su justa distribución, como si fuera posible que la jerarquía del mercado -la que opera afuera y la que opera adentro- no termine afectando a la superestructura. Se trata de lograr un proceso ascendente de empoderamiento de la ciudadanía en el que cada vez más se identifiquen Estado y sociedad en general gracias a un modo de hacer en el que primen la transparencia, las decisiones colectivas, el papel de los colectivos laborales en las decisiones, la constante re-elaboración del consenso, el control social, la educación socialista, las normas socialistas de convivencia universalmente aceptadas.

El socialismo es necesario y posible

La orientación socialista de la construcción social en Cuba no es un capricho ni una utopía, sino una necesidad para lograr un derrotero del país en lo social, lo económico, lo ecológico, lo ambiental, lo cultural, capaz de preservar el lugar geográfico y la cultura de la nación cubana, esa realidad que permite a los cubanos que en él viven y a los que viven fuera, mantener, fortalecer y desarrollar el referente identitario que nos distingue en el conjunto de los terrícolas.
Es que no se trata de una identidad en el vacío, sino de una indisolublemente asociada al presente y al futuro vivo de los cubanos, a la garantía de un desarrollo propio, frente a un mundo lamentablemente transversalizado por infinidad de conflictos, de intereses corporativos, de crisis civilizatoria.
Pensar que en condiciones de un capitalismo dependiente (el que volvería a tocarnos) es dable sostener nuestra identidad con la plenitud imprescindible para autoreferenciarse inequívocamente y defender los intereses legítimos de la sociedad cubana, es la más perversa de las utopías.
Las nuevas iniciativas que en materia económica pueden y deben desarrollarse deberán hacerse desde las premisas de la ideología de la revolución socialista cubana. Plantear que esa ideología es por naturaleza contraria a las nuevas iniciativas significa descalificarla de oficio, cuando en realidad la preservación de la justicia social de la revolución depende de si se hacen estas reformas desde esas premisas.
La plenitud a la que hacemos referencia está asociada a la independencia nacional, a la soberanía, a la preservación del espacio físico de la nación, donde está la Patria, espacio que hay que preservar de las dentelladas de las transnacionales, de las amenazas del imperialismo construyendo desde la iniciativa de todos una autonomía económica en armonía con la naturaleza y el medio ambiente y una sólida defensa.
Ser patriota cubano hoy pasa por comprender que para la defensa de la soberanía y de la independencia nacional no basta -sin por ello descalificarlas- con la buenas intenciones y las más bellas declaraciones por conmovedoras que estas sean, sino que entrañan ante todo la comprensión del significado integral, económico, cívico, jurídico, organizativo, cultural, ideológico y político del respaldo real de ese patriotismo para que sea verdadero.
La revolución socialista ha creado las formas organizativas encargadas de articular, viabilizar y fortalecer la cohesión nacional, la unidad en la diversidad. La recientemente proclamada Constitución resume las características de país que apoya la mayoría del pueblo. Corresponde a estas formas organizativas la constante actualización de sus contenidos, estructuras y funciones, y en esa tarea hay que diferenciar su papel de como actores sociopolíticos y su carácter institucional.
La necesidad de estandarizar determinadas actividades en modo alguno pueden convertirse en sí mismas en un objetivo. La sociedad no necesita que esas organizaciones simplemente funcionen, por bien que lo hagan institucionalmente hablando, sino que viabilicen en sus espacios privilegiados de actuación y de conjunto, las energías e inteligencias de la sociedad, para lo cual es imprescindible que den cuenta del protagonismo de la ciudadanía, que no la sustituyan. La construcción social de orientación socialista es necesaria en Cuba por los mismos factores esenciales que explicó Einstein en su breve ensayo y tiene ante sí las mismas interrogantes que el sabio se planteó. El camino no puede ser otro que el del empoderamiento creciente de la ciudadanía, la transparencia y el control popular, proceso que requiere de la voluntad política del partido y del Estado y de educación cívica socialista.

Darío Machado Rodríguez

Nota:
[1] El modelo que más a menudo se emplea como prueba de la viabilidad de estos argumentos liberales es el de Noruega.

Es propio de imperialistas maltratar a los pueblos

No al bloqueo a Cuba

“Después de la unión de las dos coronas en 1580, un nuevo gesto de audaz altanería vino a celebrar el imperio mundial de Felipe II. Se trata de una medalla de bronce dorado, acuñada probablemente en 1583, que muestra en una de sus caras al Rey y, en la otra, un globo terráqueo coronado por un caballo, con esta obstinada leyenda: non sufficit orbis (El mundo no es suficiente). A comienzos de 1586, Francis Drake y su fuerza expedicionaria vieron el emblema en el palacio del gobernador de Santo Domingo; al parecer, se había convertido en el “logo” de la monarquía. A los hombres de Drake les pareció una “divisa propia de la ambición insaciable de España y de su Rey”.
Del libro "El éxito nunca es definitivo. Imperialismo, guerra y fe en la Europa moderna".

Geoffrey Parker.
Traducción de Marco Aurelio Galmarini y Pepa Linares. Editorial: Taurus.

Todos los imperios caen, el de Felipe II, ambición insaciable de España y de su Rey, fue derrotado, y lo está siendo el que explota hoy al mundo (que) no es suficiente, aunque emitan una “divisa propia de la ambición insaciable” y aún sean dominantes . Las contradicciones con los pueblos, la resistencia de éstos han consumido siempre a los imperios: las dos filosofías enfrentadas, la de los pueblos: la dialéctica; la de los imperios: la metafísica. Los pueblos mueven el mundo a la mejora, los imperios paralizan el mundo en la explotación. Así lo prueba la Historia y así vuelve a ocurrir.
Las Naciones Unidas, el centro mundial de conciliación política de los gobiernos del mundo, pronuncia anualmente el mayor No al bloqueo injusto e ilegal a Cuba. Se pronuncia por el avance de la justicia, el respeto a la voluntad del pueblo cubano y su derecho a decidir su futuro. El imperio es un mecanismo de dominio, freno y agresividad, que se emplea con cualquier pueblo, y se hace más públicamente dañino con aquel que trabaje por su independencia. Con el Derecho Internacional como base de entendimiento, la extraterritorialidad del dictado estadounidense queda subrayada su ilegalidad, su marginalidad para intentar congelar el mundo en la etapa de la colonia, en el atraso más injusto. ¿Qué clase de equilibrio político se puede conseguir cuando la potencia imperial actúa como un desequilibrado? La representación de la tal potencia se siente en la ofuscación de quien abusando pierde, e histérico y violento quiere romper la igualdad de derechos para imponer los intereses de su minoría multimillonaria. Ésta, como Felipe II, lleva escrito en sus ojos el lema El mundo no es suficiente. Sin embargo el mundo afirma que su acción contra Cuba es criminal y la condena año tras año.
El bloqueo estadounidense a Cuba ha sido calificado de acto genocida. Con el bloqueo, el imperio intenta que no lleguen barcos a los puertos cubanos, que no aterricen aviones en los aeropuertos cubanos, que la población cubana no pueda viajar, no pueda comunicarse con el exterior, que no pueda comprar ni vender, que no reciba alimentos, medicinas, maquinaria, repuestos, materiales de construcción, combustible, que muera de hambre y sed, tal y como lo declaró un representante del régimen de Kennedy cuando, pletórico de odio porque Cuba había conseguido su independencia, impuso semejante candado y se quedó con la llave. Ningún sabio aplaude semejante agresión a la soberanía. Ningún sabio la defiende. ¿Entonces, por qué no se acaba con semejante aberración desde ese santuario de la conciliación mundial que es Naciones Unidas? ¿Por qué no se avanza más allá del pronunciamiento No al bloqueo injusto e ilegal a Cuba? ¿Por qué las masas mundiales lo soportan y no se sublevan contra semejante aberración?
Escribió Julio Senador Gómez (1872-1962) en su libro Castilla en escombros. Los derechos del hombre y los derechos del hambre (1915): La posibilidad de matar a un hombre o mil sin consecuencias, y la necesidad de detenerse ante la linde de un terreno, provienen de que en España, como en otros países que se llaman civilizados, el gobierno se ejerce exclusivamente por los grandes propietarios; o para hablar con más exactitud, por taifas de gentes dóciles asalariadas de tales propietarios.
Ocurre que, en todos los países en los que gobiernan los grandes propietarios por medio de taifas de gentes dóciles asalariadas, saben éstos y sus pueblos que también ellos son objeto de deseo del régimen de EEUU, da lo mismo el nombre de hoy al frente de su taifa gobernante, Trump y antes otros. ¿Es realmente inacción?: algunos gobiernos y empresas han venido haciendo frente a la arbitrariedad, a la dictadura imperial, y han sorteado la ilegalidad y han hecho frente a sanciones, multas, persecuciones… otros han operado aprovechando la situación para encarecer de forma desorbitada los costos de cualquier material y operación, y aún ha habido quien ha dejado pasar por delante suyo al criminal. Pero, ¿por qué si unos han hecho frente a la dictadura imperial, otros se han mantenido en el inmovilismo sabiendo del intento de genocidio?, ¿puede ser miedo al gigante, o puede que incuben el mismo azote que descarga en diferentes formas (sanciones, multas, cortes económicos, presiones constantes) el enemigo común?, porque los gobiernos europeos fueron colonialistas, ¿algunos de ellos ansían la vuelta a sus imperios en Latino América, en África, en Oriente Próximo, en Asia? La sangre del capitalismo, hoy neoliberalismo, la plusvalía, el intento de acaparación, tira, les sale por las uñas.
Cuba es una piedra preciosa, ¿a qué imperio no le gustaría poseerla?, es ansiada hoy más que nunca, pues en ella ven los propietarios del mecanismo de dominio, freno y agresividad lo que no nombran cuando escriben, leen, piensan, El mundo no es suficiente. La que se encuentra más allá de sus límites, la piedra preciosa que ansían y les cuestiona, Cuba les queda en la lejanía, en la cara opuesta al imperialismo, es el sentido opuesto, ejemplo de solidaridad y justicia social para los pueblos, es la organización popular de resistencia. El pueblo de Cuba es la dialéctica; los propietarios del imperios son la metafísica. Los pueblos mueven el mundo a la mejora, los imperios paralizan el mundo en la explotación. Por eso Cuba, en medio de sus grandes necesidades, transforma el mundo, son conocidos sus actos de la mayor humanidad a los pueblos más desamparados, su internacionalismo está plasmado en las páginas más limpias de la Historia por sus maestros y sus médicos. Cómo será de enorme el error de los grandes propietarios estadounidenses, de los dueños de las taifas de gentes dóciles asalariadas que hacen de gobierno, cómo será el error, que aun empleándose para que el aislamiento alcance los extremos más perversos al disparar con la Helms Burton, los médicos cubanos, 60.000, atienden a los más necesitados en 65 países, los maestros cubanos, otros tantos miles, enseñan a los más necesitados en 22 países, teniendo en cuenta que su atención médica y su enseñanza son reconocidas entre las mejores del mundo.
De igual manera los organismos internacionales reconocen a Cuba por su equiparación alimenticia, por haber alcanzado el índice más bajo de Pobreza Multidimensional (el 2º país del mundo), por su ejemplo en la reducción de manera sostenida del hambre y la desnutrición. En todos los ámbitos internacionales Cuba es reconocida como la gran potencia humanitaria, su ética es su fuerza… y el voto masivo contra el Bloqueo a Cuba es el zarandeo mundial que tan nervioso pone al imperio, que prefiere la ilegalidad, el desequilibrio para intentar que el mundo vuelva atrás. Quizás estemos en las puertas de un tiempo en el que las fuerzas crecientes le den un empujón al bandido, y éste, difícil lo veo, abandone falto de convicción y poder, o quizás, no decaiga sino que caiga, sin remedio como los anteriores imperios, derrotado, y así quede en la Historia que es la más clara enseñanza.
¿Se puede soñar con un bloqueo a los productos estadounidenses, a los propietarios del imperio, y sus taifas de gentes dóciles asalariadas ? Desprenderse de la influencia yanqui, del neoliberalismo, de su objetivo para nuestra dependencia a través del consumo, el individualismo, el sistema de pensamiento nulo, de su colonización mediante el idioma como vía por la que sumergir en su conducta espiral… desatarse de tales agarraderas pondría a la población en su propio camino, en su propia identidad y en el distanciamiento ideológico, lo que favorecería la unidad en el campo popular, en el reconocimiento de los valores solidarios, humanistas, internacionalistas, de la dialéctica, todo lo contrario de la metafísica del impositor neoliberal. Decir así: No al bloqueo injusto e ilegal a Cuba, es un buen paso en tal dirección.
Es propio de imperialistas maltratar a los pueblos, a las naciones libres; el maltratador en su intento de quitar la vida a su víctima, previamente, quiere impedir todo contacto de ésta con el entorno, con el exterior. Es fácil entender que el imperio quiera interponerse en el camino de Cuba negando a los pueblos que hay otro mundo mejor más allá de su dominio, pero entender el por qué de su comportamiento nos hace entender también su punto débil: tiene miedo a los pueblos y desconfía de todos los gobiernos. En el Derecho Internacional las leyes de un país se someten a aquél por ser conciliado. Fuera del Derecho Internacional no hay ninguno particular por encima, de modo que los extras son dictatoriales, completamente ilegales e ilegítimos. También el pueblo de EEUU vive inmerso en un régimen de imposiciones y decadencia, los continuos escándalos y fracasos por el comportamiento desequilibrado de su emperador y gobierno, han hecho que una parte de él, blancos generalmente, entre en la vía estrecha del odio a otras razas, al menosprecio y la agresión a las mujeres, a las gentes migrantes, a homosexuales, a quienes no se encuentran en la calificación de supremacistas, a otros países… y es la mayoría de ese pueblo, hoy desiologizado, desorganizado bajo el régimen imperial, el que tiene que ver al enemigo que tiene encima, y colaborar con el resto de los pueblos en la dialéctica. Todos los imperios caen, aunque emitan su “divisa propia de la ambición insaciable” en la que escriben el mundo no es suficiente. Todos son derrotados, lo prueba la Historia y así está ocurriendo hoy.
El mundo entero acompaña la justicia antiimperialista que defiende el pueblo rebelde, que enarbola la bandera de la dialéctica, el progreso de la Historia, y es el mundo entero el que escribe en los contadores de la ONU su no al bloqueo injusto e ilegal a Cuba.

Ramón Pedregal Casanova

Ramón Pedregal Casanova es autor de los libros: Gaza 51 días; Palestina. Crónicas de vida y Resistencia; Dietario de Crisis; Belver Yin en la perspectiva de género y Jesús Ferrero; y, Siete Novelas de la Memoria Histórica. Posfacios. Presidente de la Asociación Europea de Cooperación Internacional y Estudios Sociales AMANE. Miembro de la Comisión Europea de Apoyo a los Prisioneros Palestinos. Miembro del Frente Antiimperialista Internacionalista.

jueves, 24 de octubre de 2019

Chile: claves de la rebelión popular




Sexto día de protestas en Chile. Este miércoles, cientos de miles de personas salieron a las calles en todo el país a pesar de que el martes a la noche el presidente Sebastián Piñera pidió perdón y anunció un paquete de medidas sociales tratando de calmar las protestas.
El paro de mineros, portuarios, trabajadoras y trabajadores de la salud y educación, estudiantes secundarios y universitarios impusieron una huelga general que se expresó en movilizaciones masivas en las principales ciudades del país.
Miles de manifestantes vienen desafiando noche tras noche el toque de queda y la militarización de las principales ciudades y se enfrentan a una represión brutal, que ha dejado muertos, heridos, violaciones a los derechos humanos, desapariciones.
Así y todo, el Fuera Piñera y fuera los milicos se escucha de norte a sur.
En este video te vamos a explicar por qué son tan profundas las causas que desataron la furia de la población de todo el país, cómo sigue y qué importancia tiene para el conjunto de América Latina.
El pueblo chileno ya no quiere seguir viviendo como hasta ahora. La promesa de éxito económico del neoliberalismo se concretó solo para unos pocos, que pueden disfrutar de servicios de salud de primer nivel, educar a sus hijos en colegios y universidades de excelencia y garantizarles el futuro. Pero en la otra cara de la moneda, el pueblo debe vivir con sueldos muy bajos, más de la mitad no llega a ganar 500 dólares.
Lo que puede parecer alto para otros países de Latinoamérica, en Chile significa un calvario, ya que la mayoría de los servicios públicos fueron privatizados en la dictadura de Augusto Pinochet. Eso significa tener una educación pública de pésima calidad que impide a la gran mayoría el ingreso a las universidades. Implica no poder ir a la universidad por no poder pagar las enormes mensualidades o endeudarse por 10, 15 años.
Significa tener una salud cara y de mala calidad, hasta morir en la fila de un hospital público, o gastar una enorme porción del salario para pagar un plan de salud, que tampoco garantiza una atención completa.
Significa la total precarización del trabajo, ya que los derechos laborales fueron eliminados durante la dictadura. Significa jornadas de trabajo extensas, con descansos acotados. Significa el mayor abuso patronal, varios sindicatos por empresa y por lo tanto sin poder de negociación. Significa enormes índices de muertes y enfermedades laborales.
Significa no poder jubilarse porque las pensiones pueden llegar a ser del 30% del salario, mientras los dueños de las administradoras de pensión ganan fortunas con la especulación sobre esos fondos.
La educación de mercado, la salud de mercado, los servicios privatizados, precarización laboral, son los grandes pilares del neoliberalismo que impuso la dictadura y no se modificaron desde entonces.
Por eso, si bien la rebelión empezó con los secundarios saltando los molinetes por el aumento de 30 pesos en boleto del metro, una de las consignas centrales de las protestas es “no son 30 pesos, son 30 años”.
¿Cómo sigue esto? El retroceso en el aumento del precio del metro y las medidas anunciadas son solo migajas y no alcanzaron para sacar a la gente de las calles. Sin embargo, el gobierno logró reunir a los principales partidos con representación parlamentaria, de la derecha y de la centroizquierda y el poder judicial, en una muestra de unidad del régimen.
El gobierno debe enfrentar, sin embargo, el enorme descrédito de la población en esas instituciones. El parlamento, por ejemplo, cuenta con menos del 17% de aprobación.
Los partidos que no acudieron a la mesa de diálogo del gobierno, el Partido Comunista, el Frente Amplio y el Partido Socialista, se han pronunciado contra la militarización y apoyan las movilizaciones, aunque buscan canalizarlas hacia el parlamento y lograr medidas parciales que les permita capitalizar el descontento en las urnas en el futuro.
La fuerza de la calle muestra que hay condiciones para imponer las demandas, empezando por “Fuera Piñera” y “Abajo el estado de emergencia”, pero para avanzar en todas las demandas más sentidas por el pueblo y los trabajadores de Chile.
La rebelión del pueblo chileno ya trajo nuevos aires para la lucha de los pueblos que se enfrentan a los ajustes de los gobiernos y el FMI en toda América Latina, por eso es clave seguir los acontecimientos.

La Izquierda Diario

lunes, 21 de octubre de 2019

Willy Toledo, actor: ¡Hazte Soci@ de Cubainformación!




El actor y activista Willy Toledo apoya la campaña #yotambiensoycubainformacion. La Humanidad necesita a Cuba. Sin Bloqueo Económico… Ni Mediático.

domingo, 20 de octubre de 2019

El Diseño Cubano tiene su academia.




Teresa Amarelle Boué, miembro del Buró Político del Partido y Secretaria General de la FMC, y Fernando González Llort, Presidente del Instituto Cubano de Amistad con los Pueblos (ICAP), comparecerán en la Mesa Redonda de este lunes para dar detalles del Encuentro Antimperialista de Solidaridad, por la Democracia y contra el Neoliberalismo que se realizará en La Habana, del 1 al 3 de noviembre próximos, convocado por el Capítulo cubano de los movimientos sociales.

El Che y usted ante el desfile del imperio




No tiene nada de extraño si uno, no solo en la vida de cada día palpa su presencia, sino hasta en sueños se imagina que el Che está vivo, que el Che está actuando y que su muerte no existió nunca . Al fin y al cabo, debemos sacar la convicción, a todos los efectos en la vida de nuestra Revolución, de que el Che no murió nunca y que el Che, en la realidad de los hechos, vive más que nunca, está más presente que nunca , influye más que nunca, y es un adversario del imperialismo más poderoso que nunca.
Fidel Castro Ruz.

En usted, que ha engullido una educación de mandato y obediencia y presión, agresión contra el débil, es todo lo que han empujado y empujan en su cabeza, toda la enseñanza que le adocena para que sea el pilar fundamental de sus sentimientos, todo ese miedo al becerro de oro, en usted, no le ha matado la humanidad entera, aún centellea en su cabeza la protesta, la duda sobre los derechos de los suyos y su futuro, y tras ese frente chispea el afán por saber, el desfile que ve con golpes de corazón se lo demuestra. El Che Guevara tenía un gran corazón, veía lo que hacía el imperio y luchaba con los pueblos.
Reconozca que estos momentos no son distintos de tantos pasados. Reconozca que lo que ve desfilar ante sus ojos, los pueblos asolados, empobrecidos por los bloqueos como el de Cuba, Venezuela, Gaza-Palestina, Siria... empobrecidos por la persecución imperial con sanciones, robos de las reservas de estos países depositadas en bancos de EEUU, Inglaterra, Alemania, Portugal…; reconozca a los pobres que desfilan en pleno entrenamiento de sus defensas, aunque estén hambrientos, y cómo se defienden, con uñas y dientes de las garras trumpistas, militares, informativas, económicas…; reconozca a quienes desfilan delante de usted asesinados hoy, palestinos, sirios, yemenitas… por los bombardeos estadounidenses, sionazis, saudíes; reconozca las ciudades en ruinas que desfilan, Gaza, Alepo, Homs... y las amenazadas por el imperio como tropa inmensa; desfilan las aguas robadas, potables y no potables, y esos bosques que arden; también desfila, usted la ve, la oye, la información falsa, trucada, aséptica y vacía de interés humano, alabadora y babeante a quien explota, la propaganda que el imperio fabrica; y desfila ante usted la ignorancia, los chismorreos con los que los holliwood infecta las mentes, las distrae, idiotiza a los inocentes y a quienes viven vacíos de razón; desfilan, cómo no, las opresiones siempre actuales, el machismo, el racismo, la xenofobia, desfilan las pobrezas diversas, y la brutalidad representada por el asesino en desfile y su sistema: Trump y el capitalismo, con su crisis mundiales de la mano.
Ante usted desfila la vergüenza de los tiempos en que vivimos, la afrenta, el desafío y la violencia con la que EEUU arremete al presente de lucha por la supervivencia, la justicia en igualdad, el porvenir humano. Se lo repito: En usted, que ha engullido una educación de mandato y obediencia y presión, agresión contra el débil, todo lo que tiene en la cabeza, y le han hecho que esa enseñanza que le adocena sea el pilar fundamental de sus sentimientos, el miedo al dueño del becerro de oro, en usted, también en usted, aún centellea la protesta, la duda sobre los derechos de los suyos y su futuro, y tras ello chispea el afán por saber, vea el desfile, no siga resignándose.
Vea cómo los aliados de EEUU en Latino América, teniéndolos por padres, sin que los bloqueen financieramente, económicamente militarmente, sin que los sancionen, les corten el turismo, el suministro de luz, sin que les impidan la importación /exportación de petróleo, sin que les impidan hacerse con medios industriales y su uso, sin que les impidan adquirir materias primas, máquinas, herramientas, repuestos, alimentos, medicinas, disponiendo de todo el dinero del país tras la salida de los gobiernos progresistas, dolarizan su economía, con lo que toda ella queda en manos de Wall Street, en manos de los imperialistas, alcanzando con la guía de tal amo los índices de pobreza más altos conocidos sólo en las dictaduras, que, además, esos mismos les propiciaron.
¿Será que el régimen imperial, su padre, se aprovecha de ellos? ¿o, será que ellos, sumisos al imperio, al becerro de oro, al capitalismo, desprecian a su pueblo y participan de su expolio? ¿Será que el capitalismo profundiza las diferencias entre burguesía y clase obrera? ¿Será que la supervivencia de la explotación social se hace a base de explotación social cada vez mayor? ¿A qué cree que se debe el que nos digan con insistencia la falsa noticia de que los países que se independizan de su poder se merecen el bloqueo de todos sus bienes? ¿A qué cree que se debe el que las burguesías que venden sus países al imperio apoyan las sanciones, las persecuciones, las amenazas y los ataques a los pueblos que se independizan? Vuelvo a preguntarle: ¿Por qué cree que nos insisten con la idea de que éstos fracasan?
Los que se esclavizan al FMI, que es EEUU, que es la violencia guerrera en forma de bloqueos, sanciones, robos, violencia-violación... que discurren por el mundo contra leyes internacionales, Derechos Humanos, Derechos de los Pueblos… los que se esclavizan al FMI, que es EEUU,esos gobiernos a los que el imperio no aplica bloqueos, sanciones, multas, a los que no pone impedimentos comerciales, su padre los lleva a la pobreza, a la deuda infinita, a la desposesión de todo aquello en lo que el pueblo tiene alguna defensa por derecho. Véase Ecuador, la riqueza anteriormente creada ha desaparecido. El régimen neoliberal de Moreno, en huida, ha destruido lo creado y deja la deuda a pagar por el pueblo, que tras los despidos masivos, la subida de los precios, los míseros salarios, el retiro de las ayudas, el final de los bienes públicos, la corrupción gubernamental galopante, ha producido día a día la pobreza, el hambre, la reducción de su defensa social y su justicia, ha dejado libres a los gobiernos ladrones anteriores escondidos en EEUU, y ha abierto la puerta a los invasores militares yanquis. Pero ha perdido la primera batalla, el pueblo le ha hecho doblar la rodilla, quizás retire el decreto 883, ¿y ahora cuál será su maniobra para torcer el triunfo popular?. Queda por plantear los asesinatos de la policía del tirano Moreno. Quedan los miles de detenidos y heridos. Quedan reivindicaciones como las dimisiones de ministros y hasta la de él mismo. Queda la irrupción de tropas estadounidenses para establecerse en bases militares. Queda el futuro en el peligro de volver atrás, de quedar en el camino de la dictadura imperial. Moreno lo traicionó todo, a Correa, encarceló a Jorge Glas, persiguió y persigue a los dirigentes populares, despide, detiene, aumenta la edad de jubilación, recorta salarios, endeuda… y su asimilación al régimen estadounidense le llevó a cobrar sobornos, esconder dinero ecuatoriano en bancos extranjeros, generalizar la corrupción y amnistiar a los corruptos los miles de millones que debían, y una vez descubierto emprendió una campaña contra Julián Assange, el periodista merecedor del Premio Nobel de la Paz, que fue capaz de mostrar al mundo los crímenes de guerra del régimen brutal de EEUU, y quitarle la ciudadanía ecuatoriana y entregarlo a la policía inglesa para que lo ponga en peligro de muerte, ese es el deseo del gobierno denunciado. Cuál es el grado de criminalidad de Moreno que ha recibido el apoyo de los Bolsonaros continentales, a ellos se ha sumado Pedro Sánchez, el otro Moreno de España.
Se ha escuchado en una grabación de los acontecimientos en Quito que un esbirro de Moreno y los suyos gritaba entre los disparos la orden: ¡bala! ¡bala! ¡bala! ¡bájenlos! ¡bájenlos! ¡bájenlos!
¿ Qué contarán en los libros los historiadores sobre Moreno? ¿De qué será responsable? ¿Con que palabra se le recordará? ¡Zánganos! El que ha insultado de semejante manera al pueblo ecuatoriano rompió la paz social para obtener ventajas estratégicas para sus protectores reaccionarios que se cobijan bajo el imperio estadounidense.
En los próximos días sabremos el camino que ha tomado Ecuador.
¿Se ajustan a la realidad los indicadores políticos, económicos, militares, el desfile por el que empezamos, que nos dicen con todos los datos que el capitalismo, el imperialismo, y sus gobiernos aliados, matan?
En usted, que ha engullido una educación de mandato y obediencia y presión, agresión contra el débil, es todo lo que han empujado y empujan en su cabeza, toda la enseñanza que le adocena para que sea el pilar fundamental de sus sentimientos, todo ese miedo al becerro de oro, en usted, no le ha matado la humanidad entera, aún centellea en su cabeza la protesta, la duda sobre los derechos de los suyos y su futuro, y tras ese frente chispea el afán por saber, el desfile que ve con golpes de corazón se lo demuestra. El Che Guevara tenía un gran corazón, veía lo que hacía el imperio, y luchaba con los pueblos.

Ramón Pedregal Casanova

Ramón Pedregal Casanova es autor de los libros: Gaza 51 días; Palestina. Crónicas de vida y Resistencia; Dietario de Crisis; Belver Yin en la perspectiva de género y Jesús Ferrero; y, Siete Novelas de la Memoria Histórica. Posfacios. Presidente de la Asociación Europea de Cooperación Internacional y Estudios Sociales AMANE. Miembro de la Comisión Europea de Apoyo a los Prisioneros Palestinos. Miembro del Frente Antiimperialista Internacionalista.

sábado, 19 de octubre de 2019

Los hombres del Che, ayer y hoy




«Dame un pedazo, llévame en brazos
que otra vez necesito sentirme en paz.
Patria sagrada, ansias del alba,
No te olvides que andamos muy mal sin ti».
Los versos de Santiaguito Feliú nos lanzan al camino con la adarga al brazo, está planteada una nueva aventura espiritual que lleva por santo y seña La Pupila Asombrada, y eres, bienvenida, bienvenido, y también viceversa

Un acto entrañable de solidaridad

Escribo este artículo a propósito del llamamiento de Cuba al Encuentro Antimperialista de Solidaridad, por la Democracia y contra el Neoliberalismo, que tendrá lugar en La Habana del 1 al 3 de noviembre próximos, organizado por el Instituto Cubano de Amistad con los Pueblos (ICAP), la Central de Trabajadores de Cuba (CTC), el Capítulo Cubano de los Movimientos Sociales y la Jornada Continental por la Democracia y contra el Neoliberalismo.
No hay duda que el Encuentro será una importante contribución a la búsqueda de la imprescindible unidad de la izquierda de nuestra región y al fortalecimiento de la solidaridad con las causas justas por las que luchan nuestros pueblos.
El llamamiento del Encuentro señala la importancia de la participación en el mismo de una heterogénea representación de Estados Unidos y Canadá, amigos, señala el llamamiento, “que siempre se han puesto del lado de la justicia” en el caso de las luchas del pueblo cubano por su liberación.
Precisamente quiero aprovechar la oportunidad para referirme a un acto de genuina y profunda solidaridad en la historia patria. Por casualidad estaba releyendo el valioso libro de la respetada académica cubana, Marial Iglesias Utset, Las metáforas del cambio en la vida cotidiana: Cuba 1898-1902, cuando llego a los asuntos concernientes a la política educacional del gobierno interventor durante la primera intervención estadounidense en Cuba (1899-1902).
La notable acción solidaria con el pueblo cubano en aquel vital momento histórico fue obra de Alexis Everett Frye –estadounidense-, Superintendente de Escuelas de Cuba, nombrado por el gobernador militar provisional de Cuba, Leonard Wood.
Únicamente quiero añadir al relato de la autora del libro, el cual citaré a continuación, es que Alexis E. Frye, nació en el estado de Maine, EE.UU.; fue educador, dedicado a los métodos de la enseñanza y a la geografía. Contaba entonces con 40 años de edad, y estaba recién casado con una educadora cubana, María Teresa Arruebarrena. Cuba en aquellos años tenía una población aproximada de 1 millón 600 mil personas, entre estos 350 mil jóvenes entre 5 y 14 años de edad. De sólo 775 escuelas públicas que había en toda la Isla en 1887, al terminar la devastadora Guerra de Independencia en 1898 solamente existían 541. La inmensa mayoría de la población cubana de entonces era analfabeta. Pero el clamor general por la independencia era continuo y profundo.
Escribe sobre estos asuntos la autora:
[…] El mismo Máximo Gómez relata en una carta escrita en 1900 como, al visitar con su familia el 10 de octubre la tumba de su hijo y la de Maceo, coincidió con más de 400 niños de las escuelas cercanas al lugar que fueron allí “en orden y compostura admirable a colocar flores sobre la tumba de los héroes”.
[…] Entonces, a contrapelo de la política cultural anexionista del Gobierno de ocupación, la escuela pública se convirtió en esos años en un importante espacio de difusión y reproducción de prácticas nacionalistas y en particular de la simbología patriótica.
[…] Además de la fuerte presencia de sentimientos nacionalistas entre los mismos maestros y miembros de las juntas de educación locales, el hecho de que el superintendente norteamericano de escuelas de Cuba [Alexis Frye] fuese un hombre de ideas progresistas, expresadas a menudo en abierta contradicción con los típicos funcionarios neocoloniales como era el caso del gobernador de Cuba, Leonard Wood, propició este tipo de conversiones.
De hecho por increíble que pueda parecer, la primera edición masiva hecha en la Isla del “Himno de Bayamo” (100,000 ejemplares) fue impresa en diciembre de 1900 por iniciativa de Alexis Frye, costeada de su propio peculio.
“Cuba –se enfatiza en la carta [fechada en La Habana el 17 de diciembre de 1900 con la firma del señor Frye] que acompañó a la distribución del folleto — debe enseñar a sus hijos que cualquier nación que intente pisotear la libertad humana es tirana y que todo tirano es cobarde. Debe enseñarles que es forzoso que los héroes cubanos estén siempre apercibidos para defender con su vida y su tesoro, la independencia patria, contra todo poder extranjero, sea cual fuere, que en años venideros intente empuñar el cetro del tirano.”
El folleto con la letra del himno patriótico fue repartido entre los niños de las escuelas de toda Cuba, con el propósito de que en “el primer día de este nuevo siglo en todas partes de la Isla se escuche el Himno Nacional, en forma tal que los niños de todos los hogares puedan elevar su voz en coro, y que todos aprendan la más alta lección de patriotismo, que para siempre, escudará de todo peligro a esta bella y heroica tierra”.

Andrés Gómez, director de Areitodigital

Inestable oferta de alimentos aqueja a Cuba

“Los alimentos están disgregados: hay que ir a varios lugares para encontrar todo lo que se necesita”, describió a IPS la jubilada Rita Lina Pintado, sobre el principal obstáculo que enfrenta para completar su canasta de productos a precios subsidiados entregada cada mes por el Estado.
“Algunos productos están casi siempre disponibles, la dificultad está en el precio, otros fluctúan: a veces se estabilizan y otras desaparecen. El problema está en la inestabilidad de la oferta”, continuó esta consumidora que se autocalifica como casi de “la cuarta edad” y que vive en el municipio de Plaza de la Revolución, uno de los 15 que conforman La Habana.
La oferta reducida e inestable limita desde hace décadas el acceso a los alimentos en Cuba, que importa entre 1800 y 2000 millones de dólares anuales de comida, pero ese problema se agudizó este año debido a las fuertes sanciones de Estados Unidos al país caribeño y su aliado Venezuela.
Con una cuota básica por persona compuesta fundamentalmente por arroz, frijoles, azúcar, sal, café, algo de carne y huevos, la cartilla de racionamiento sostiene las necesidades de un tercio del mes de las familias mientras el resto deben adquirirlo en tiendas en divisas y mercados agropecuarios de libre oferta.
Economistas calculan que se requiere un salario medio de 2800 pesos (equivalentes a 112 dólares) mensuales solo para atender las necesidades alimenticias, en este país insular caribeño de 11,2 millones de habitantes donde el salario promedio estatal equivalía a 30 dólares al cierre de 2018.
Se prevé que durante este año haya un incremento en los sueldos por el alza salarial realizada en julio al sector presupuestado (estatal), pero que quedará muy rezagado, en cualquier caso, respecto a la proyección de los economistas para satisfacer la canasta alimentaria.
Justo en la búsqueda para completar el resto del mes, los consumidores enfrentan las dificultades en el acceso a los alimentos, sobre todo de aquellos propios de una dieta saludable, que es la meta remarcada por especialistas y organismos internacionales este miércoles 16 de octubre, el Día Mundial de la Alimentación.
Mientras persiste la lucha por el hambre cero en el mundo, la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) y el Programa Mundial de Alimentos (PMA) resaltan la alimentación sana, que representa otros esfuerzos para los países y revisar sus sistemas y políticas agroalimentarias por la calidad nutricional.
Estos temas y el apoyo a la producción local de alimentos por la elevada dependencia externa y para mejorar el acceso destacan en la Jornada Nacional de Celebración en Cuba, un amplio programa de actividades, sobre todo comunitarias, organizado por la fecha entre entidades cubanas y FAO y PMA, que comenzó el 2 de octubre y culmina el sábado 19.
“Siempre tengo que desplazarme fuera de mi municipio, hacia los grandes centros comerciales, para poder conseguir la comida”, compartió Zoe Díaz, que es vecina de otro municipio habanero, el de Diez de Octubre, al poner al desnudo las brechas entre los lugares más céntricos respecto a los periféricos.
“Los alimentos más difíciles de comprar son las carnes (por su alto costo y disponibilidad); la mantequilla, queso y yogurt (por iguales motivos); el arroz importado (disponibilidad) y las galletas de dulce en formatos pequeños y baratas para la merienda escolar (por su disponibilidad)”, enumeró Díaz.
“Ha habido momentos mejores y otros críticos. No se logra que exista disponibilidad de todos los alimentos básicos a la vez”, valoró, en un año marcado por la escasez de productos como carne de pollo y aceite vegetal, que llevó a las autoridades a racionar la venta y topar precios en los mercados agropecuarios privados.
“Siempre falta algo”, apuntó Díaz, que describe de esa manera el complejo panorama cubano, donde la política con subsidios estatales, apoyos a grupos vulnerables y comedores escolares, garantiza una base alimentaria que mantiene de forma sostenida bajos índices de desnutrición crónica y hambre, reconocida en 2018 por FAO.
“En América Latina existe un problema menos visible: la inseguridad alimentaria”, explicó Juan Carlos García Cebolla, jefe del equipo de Derecho a la Alimentación de FAO, en su sede mundial en Roma. “No es crónico, pero durante el año las familias atraviesan periodos de escasez y tienen que tomar medidas para gestionarla”, indicó en diálogo con IPS.
Con diferencias por países, García Cebolla indicó que “en el conjunto de la región la franja de población afectada oscila el ocho por ciento”. “El manejo de la escasez empieza por eliminar los alimentos de mayor coste, que suelen ser frutas, hortalizas o proteína animal, luego le sigue reducir cantidades y por último frecuencias”, detalló.
El experto destacó además el fuerte movimiento en la región para “introducir el derecho a la alimentación en las constituciones”. Puso de ejemplo los casos de Brasil y México, que en 2011 por sendas enmiendas colocaron este derecho en sus leyes fundamentales, y la nueva Constitución cubana, vigente desde abril.
Reconocidos por las autoridades, en la isla caribeña existen problemas nutricionales como la anemia y obesidad, que se derivan de la calidad de la dieta y reafirman otras deudas para alcanzar la seguridad alimentaria, un concepto que abarca desde la disponibilidad, acceso estable hasta el consumo adecuado de alimentos.
“Los vegetales y las frutas han faltado”, dijo a IPS el jubilado Andrés Dovale, quien asegura pasar trabajo para encontrar de estos productos a excepción del aguacate y el banano dulce. Mientras, Lupe González destacó como más difíciles de comprar los “alimentos sanos: frutas sin químicos, hortalizas, vegetales y carnes blancas”.
Medios estatales revelaron en julio que 42 por ciento de la población cubana tenía sobrepeso y que afectaba más a las mujeres ese factor de riesgo para padecer enfermedades cardiovasculares e hipertensión arterial, entre otras. Pero lo más preocupante radicó en que 13 por ciento del total eran niños.
El Programa de apoyo a la lucha contra la anemia en grupos vulnerables indica que la padecen 50 por ciento de lactantes entre 6 y 11 meses y 30 por ciento de los niños y niñas de seis a 23 meses. Causada por el déficit de hierro, la anemia afecta a 30 por ciento de las mujeres en edad fértil y 24 por ciento de las embarazadas.
En estos problemas se entrecruzan limitaciones en el acceso con malos hábitos alimentarios.
“Las condiciones económicas de cada familia influye: a mayor capacidad monetaria, ya sea por ingresos productos del trabajo o por remesas familiares, el acceso a los alimentos durante un año se torna más o menos viable”, compartió el crítico de arte y periodista Joaquín Borges Triana, residente en el municipio de Centro Habana.
A su juicio, “los tipos de alimentos que resultan más difíciles de comprar son aquellos procedentes de las importaciones realizadas por el Estado”.
La inseguridad por la alta dependencia externa resalta cuando la administración de Donald Trump anuncia más medidas restrictivas contra Cuba por su apoyo al gobierno del presidente venezolano Nicolás Maduro, que limitan más en la actualidad la ejecución de pagos en el exterior, el acceso a créditos y la llegada de suministros petroleros de su aliado.
Incluso las autoridades califican la producción de alimentos de asunto de seguridad nacional, cuando el país opera con 80 por ciento del combustible necesario y tomó en septiembre medidas de ahorro como mayor uso de la tracción animal en las labores agrícolas.

Ivet González
IPS

La historia del creador de Goofy: Art Babbit, un genio comprometido




Ahora todos saben que el personaje es un perro, pero pocos conocen la historia de su creador, el líder de la huelga de Disney de 1941.

Goofy, el tercer personaje más popular entre los clásicos de Disney -después de Mickey y de Donald- estuvo en boca de todos A veces en las redes se viralizan noticias absurdas que se retroalimentan a través de múltiples medios que divulgan el hashtag del momento. A fines de septiembre, durante varios días, el comentario en portales y programas radiales fue el dato simpático de que por fin se saldaba una duda supuestamente histórica.
En todas partes la misma nota de color: Goofy es un perro, no una vaca. Es de la misma especie que Pluto, aunque uno camina en dos y el otro en cuatro patas. La que es vaca es Claudette, con la que inclusive alguna vez Goofy tuvo un romance. La respuesta a semejante interrogante fue brindada por la cuenta de atención a los huéspedes del parque de diversiones Walt Disney World.
Es una ocasión propicia para recordar a Art Babbit, el animador que a mediados de la década del ‘30 creó la personalidad definitiva de Goofy, con su forma de moverse tan característica, con las articulaciones quebradas y ese un movimiento de sube y baja, que acompañan su simpatía despistada.
Babbit –nacido como Arthur Babitsky en 1907, muerto en 1992- comenzó muy joven a trabajar en los estudios Disney. Desde el principio se destacó por su talento, participando en el fundacional y controvertido filme Los tres chanchitos, en 1933. Con su animación le dio vida a personajes y escenas que quedaron en la historia del cine, como a la Reina Malvada de Blanca Nieves y los siete enanitos (1937), a Geppeto, de Pinocho (1940) y al baile de los hongos en Fantasía (1940).
A partir de la iniciativa de Babbit se introdujeron en Disney clases de arte para los animadores, además de incorporarse el registro fílmico y la observación de la realidad como método de trabajo, lo que permitió un salto en calidad notable. Con la forma en la que trabajó la psicología y los movimientos de Goofy se inauguró un estilo de trabajar a los personajes que aun sigue vigente.
Su último trabajo de importancia en el estudio fue en marzo de 1941, en Dumbo, que se estrenó a fines de ese mismo año. Allí creó a la cigüeña de Western Union que trae al bebé elefante al circo. Y animó una escena que cobra especial relevancia al conocer lo que sucedió poco después. Ese fue su último trabajo para Disney: darle vida al momento en el que se ve la sombra de los payasos mientras cantan “golpeemos al gran jefe por un aumento”, un gag que en el doblaje se pierde.
El motivo por el que esta ridiculización (o guiño) a quienes reclaman aumento tiene mucho significado es porque en ese entonces Babbit se había sumado al Screen Cartoonist Guild, el primer sindicato independiente en el rubro de la animación, surgido durante la Gran Depresión de la década del 30, en reemplazo del sindicato dirigido por la mafia y de un sindicato pro empresarial creado por Disney. El animador estaba disgustado por el contraste entre los privilegios -que el mismo gozaba- y la situación de quienes cobraran los peores sueldos, entre ellos su ayudante, a quien él mismo le dio dinero para compensar la desigualdad salarial. Las mujeres que trabajaban en la sección de tinta y pintura eran las que menos ganaban.



La situación se había agravado con el comienzo de la Segunda Guerra Mundial. En lugar de pagar los bonos que había prometido mientras hacían Blanca Nieves, película para la que los animadores trabajaron a destajo y que fue un éxito internacional, en Disney decidieron invertir las ganancias en mudarse a unos nuevos estudios ubicados en Burbank, sobre las colinas de Hollywood, en Los Ángeles.
Las nuevas instalaciones tenían lujos, como un gimnasio y aire acondicionado, pero solo para el selecto grupo premiado por Walt. El malestar se expandió entre los trabajadores. Babbit tomó partido por sus compañeros.
En febrero del año `41 Walt decidió dar un discurso a su personal, donde defendió la existencia de privilegios. Pero no surtió efecto. Los reclamos continuaron. Sin embargo, la empresa no quería reconocerle legitimidad del nuevo sindicato. A mediados de mayo despidió a dos docenas de empleados. El sindicato hizo una declaración en protesta. La respuesta fue el despido de Babbit, que había sido elegido como el representante del sindicato en Disney. Para Walt, eso fue una ofensa personal. El 29 de mayo comenzó el histórico paro de Disney, que duró nueve semanas. Babbit fue el principal organizador, junto al líder del sindicato, Herbert Sorrell.
“Representamos a la mayoría de los animadores del estudio. Exigimos el reconocimiento de nuestro campo de acción y un contrato colectivo. Exigimos recomposición salarial y el mejoramiento de las condiciones de trabajo. Queremos que nos paguen los bonos que nos prometieron y que nunca nos pagaron, queremos sacarnos de encima a los hombres de la compañía que están sobre nuestra nuca cada vez que nos damos vuelta”, le dijo Babbit en pleno conflicto al Daily Worker , el diario del Partido Comunista estadounidense.
La huelga fue histórica. Desde el principio, unos 300 trabajadores montaron un campamento frente al estudio para garantizar el piquete de huelga. Tuvieron mucho apoyo. El sindicato de actores se sumó con entusiasmo. El sindicato de chefs montó una cocina para sostener la alimentación de los huelguistas. La central obrera de Los Angeles manifestó su apoyo. Los trabajadores de Technicholor anunciaron el boicot a las producciones de Disney. Una columna salió desde la Warner Brothers y marchó escenificando la Revolución francesa, con una guillotina, con la consigna “liberté, egalité y close-shopé (contrato colectivo)”, según contó muchos años después Babbit en el documental Art Animation.
Todos los días hacían asambleas, mañana y tarde. La creatividad era desbordante. Proliferaron los carteles e intervenciones artísticas en las que se utilizaron los personajes de Disneytanto en la puerta de los estudios como en los cines donde se proyectaban películas de la compañía. Nunca había habido una huelga así. Los medios de la época se hicieron bastante eco del conflicto. Disney empezó ver como se degradaba su preciada imagen. Fue un antes y un después en la industria cinematográfica. El animador Bill Melendez, que participó de la huelga siendo muy joven, comentó respecto a Babbit y a Bill Tyla (que animó a Gruñón de Blancanieves), que fueron una excepción entre los más reconocidos animadores al sumarse a la huelga. “Estos dos héroes, dieron su carrera, eran de los que más ganaban y dieron todo para apoyar a un grupo de rebeldes, les doy el crédito por el mínimo de decencia que encontré en Hollywood”, reconoció Melendez, que se hizo famoso trabajando en la serie Peanuts.
La huelga se solucionó cuando Walt tomó distancia. Por consejo de Nelson Rockefeller y del Departamento de Estado, emprendió junto a un grupo de acompañantes un viaje por Sudamérica, que lo llevó a conocer la Argentina.
Fruto de ese viaje, nació el forzado Goofy gaucho, que aparece en Saludos Amigos, de 1942, una película concebida como parte de una política de “buena vecindad” para que los países del sur se sientan seducidos para sumarse a los Aliados.
En ausencia de Walt, intervino el National Laboral Relation Board (algo así como la Secretaria de Trabajo) que instó a que se firme un contrato colectivo de trabajo con el sindicato y sean reincorporados los despedidos. Su hermano Roy, socio y cofundador de la empresa, con pragmatismo accedió a los pedidos de los huelguistas. Sin embargo, en noviembre de ese año, Babbit fue despedido. El animador no se rindió. Inició acciones legales y se fue a pelear a la Guerra, como integrante de la Marina. Cuando volvió, en 1945, había ganado el juicio y pudo volver a su puesto de trabajo.
Pero el clima era irrespirable y en 1947, Babbit se fue definitivamente a trabajar a otro estudio, en donde participó de la creación de Mr. Maggo. Ese mismo año, Walt Disney denunció a cuatro integrantes del sindicato, entre ellos a uno de sus animadores, Dave Hiberman, ante el Comité de Actividades Antiestadounidenses.
En plena caza de brujas contra los comunistas, insistió con que la huelga de 1941 había estado dirigida por Moscú. Lo que nunca pudo evitar Walt, es que las conquistas que consiguieron Babbit y sus compañeros sean borradas de un plumazo, ya que desde entonces, en la fábrica de fantasías animadas existan aun hoy negociaciones salariales colectivas y reconocimiento a la organización sindical.

Tomás Eliaschev
Periodista | @TomasEliaschev
Jueves 17 de octubre | 22:34

viernes, 18 de octubre de 2019

Voces de Cuba recuerdan legado de Prima Ballerina Assoluta, Alicia Alonso


La cultura cubana de luto por la desaparición de Alicia Alonso, Prima Ballerina Assoluta del Ballet Nacional de Cuba




Alicia Alonso, quien durante 88 años como bailarina, coreógrafa y pedagoga contribuyó con su arte genial a poner el prestigio de su Patria en el más alto sitial en las cuatro esquinas del mundo, falleció en el Hospital CIMEQ, de La Habana, a las 11 de la mañana de este jueves 17 de octubre del 2019, a dos meses y tres días de cumplir 99 años de edad.
Hace 71 años fundó en La Habana el Ballet Alicia Alonso, hoy Ballet Nacional de Cuba. Como su directora y figura principal, ha sido inspiración y guía para la formación de varias generaciones de bailarines cubanos, con un estilo propio que ha conquistado un lugar destacado en el ballet internacional.
Díaz-Canel lamenta muerte de Alicia Alonso: “Nos deja un insuperable legado”
“Alicia Alonso se ha ido y nos deja un enorme vacío, pero también un insuperable legado”, escribió en Twitter el presidente de la República de Cuba, Miguel Díaz-Canel.

Alicia en su eterna y universal cubanía

Nacida el 21 de diciembre de 1920, en el reparto Redención, popular barriada de Marianao, en un modesto hogar formado por Antonio Martínez Arredondo, teniente veterinario del ejército, y Ernestina del Hoyo y Lugo, refinada modista, la ilustre bailarina encontró en la danza desde muy temprana edad la vocación que guiaría toda su vida.
Su ruta estelar, iniciada en la Escuela de Ballet de la sociedad Pro-Arte Musical de La Habana, en 1931, se vio obligada a tomar nuevos derroteros al tener que marchar al extranjero por el escaso nivel, los prejuicios y el carácter elitista que enfrentaba el ballet en la Cuba de entonces.
Trazar su orbita artística profesional es tarea ciclópea, pues abarca desde las comedias musicales de Broadway, el Ballet Caravan, el Ballet Theatre de New York, el Ballet de Washington y el Ballet Ruso de Montecarlo, hasta sus colosales triunfos como estrella invitada de las más relevantes compañías, festivales y galas de ese género artístico en todo el mundo.
Su excepcional categoría de prima ballerina assoluta no obedeció a una caprichosa reputación jerárquica, sino al dominio de un vasto repertorio de 134 títulos que abarcó las grandes obras de la tradición romántico-clásica y creaciones de coreógrafos contemporáneos.
Cuando el 28 de noviembre 1995, en el Teatro Massini de la ciudad italiana de Faenza, hizo un alto en su trayectoria como intérprete, ya había logrado establecer un record difícil de igualar, no solo por el tiempo de vigencia sobre las puntas, sino por el nivel de excelencia con que lo hizo.
Pero la grandeza de la Alonso, no radica solamente en habernos representado triunfalmente en 65 países, recibir las más atronadoras ovaciones, imposible de contabilizar, de Helsinki a Buenos Aires, de New York a Tokio o Melbourne, sino haber puesto al servicio de su Patria todos los honores recibidos, entre ellos los 266 premios y distinciones internacionales, 225 de carácter nacional y las 69 creaciones coreográficas -románticas, clásicas y contemporáneas, que ha realizado, revertiéndolos como frutos del quehacer que ella ha visto siempre como modesta contribución no solo a su cultura, sino a la cultura danzaría mundial.
Grado de Doctora Honoris Causa por la Universidad de La Habana, el Instituto Superior de Arte de Cuba, la Universidad Politécnica de Valencia, de España, y la Universidad de Guadalajara, en México.
Orden “El Águila Azteca”, conferida por el estado mexicano en 1982 Encomienda de la Orden Isabel la Católica, adjudicada por el Rey de España en 1993.
Creó la Fundación de la Danza que lleva su nombre, y el Instituto Superior de la Danza Alicia Alonso adscripto a la Universidad Rey Juan Carlos.
Miembro de Honor de la Asociación de Directores de Escena de España (ADE).
Medalla de Oro del Círculo de Bellas Artes de Madrid, en 1998.
Título de Heroína Nacional del Trabajo de la República de Cuba.
Orden José Martí, máxima condecoración que otorga el Consejo de Estado de la República de Cuba.
En el 2002 fue nombrada Embajadora de la República de Cuba, por el Ministerio de Relaciones Exteriores.
Fue investida en París como Embajadora de Buena Voluntad de la UNESCO.
El presidente de Francia le confirió en el año 2003, el grado de oficial de la Legión de Honor.
Recibió en Cannes, en el 2005, el Premio Irene Lidova por toda su carrera artística.
Recibió, de manos de los Reyes de España, la Medalla de Oro al Mérito en las Bellas Artes otorgada por el gobierno de ese país.
En 2012 recibió el Premio Alba de las Artes, de la Alianza Bolivariana para las Américas.
En 2017 recibe el título de Embajadora Mundial de la Danza otorgado por la UNESCO.
Hace más de medio siglo al regresar a nuestro país cargada de honores extranjeros, no vacilaba en declarar:
“Toda mi esperanza y mis sueños consisten en no volver a salir al mundo en representación de otro país, sino llevando nuestro propia bandera y nuestro arte. Mi afán es que no quede nadie que no grite: ¡Bravo por Cuba!, cuando yo bailo. De no ser así, de no poder cumplir ese sueño, la tristeza sería la recompensa de mis esfuerzos”.
Esa patriótica postura la llevó a fundar, junto a Fernando y a Alberto Alonso el 28 de octubre de 1948, el hoy Ballet Nacional de Cuba (BNC), y en 1950 la Academia de Ballet que llevó su nombre y tuvo la tarea histórica de formar la primera generación de bailarines dentro de los principios técnicos, estéticos y éticos de la hoy mundialmente reconocida escuela cubana de ballet.
Durante 71 años, especialmente a partir del triunfo de la Revolución, pudo, con mano firme situar al BNC entre las compañías de mayor prestigio a nivel mundial, fundamentar un sistema de enseñanza que hoy abarca la totalidad de la Isla y es la garantía del ballet cubano, así como estimular un movimiento de colaboración internacionalista que en el campo del ballet Cuba ha extendido a casi medio centenar de países de América, Europa, Asia y África.
Es la Alicia guía y mentora, que con su don aglutinador pudo convocar en La Habana, en 26 Festivales Internacionales de Ballets, a las más célebres personalidades de la danza, en una fiesta de arte y amistad. Y es también la Alicia que hemos visto dar la mejor entrega de su magisterio, lo mismo en escenarios de la más alta prosapia que en rústicas tarimas, en plazas públicas, fábricas, escuelas y unidades militares, consciente de que al pueblo, cualquiera que éste sea, siempre se asciende y nunca se desciende.
Quienes tuvieron el privilegio de estar a su lado, conocieron también el extraordinario ser humano que había en ella, que por coraje y férrea disciplina no se dejó derrotar nunca por quebrantos físicos, vicisitudes o incomprensiones.
Fue la Alicia nuestra, que aunque bañada de cosmopolitismo añoró oír los cantos de nuestros gallos, gustar del olor al salitre de su Malecón habanero, valorar la mariposa y el coralillo como las flotes más exquisita, o fascinarse con los adelantos científicos y los misterios del cosmos. “Un ímpetu tenaz, frenético, heroico —disparado contra la enfermedad y contra el tiempo— hacia la perfección incansable.”, como acertadamente la definió Juan Marinello.

Cubainformación

miércoles, 16 de octubre de 2019

Nuevas medidas económicas,




El Vicepresidente de la República, los Ministros de Economía y Planificación, Finanzas y Precios, Comercio Interior y Comercio Exterior e Inversión Extranjera, la Ministra Ministra-Presidenta del Banco Central de Cuba y la Vicepresidenta Primera de la Corporación CIMEX participarán este martes en la Mesa Redonda para informar a la población de nuevas medidas económicas adoptadas por el Gobierno.

martes, 15 de octubre de 2019

Bloqueo a Cuba: ¿propaganda comunista?


Afirma Cuba en Unesco que nada ni nadie detendrá proyecto socialista




El embajador cubano Oscar León afirmó hoy en el Consejo Ejecutivo de la Unesco que la isla caribeña no renunciará al proyecto socialista escogido de manera soberana por sus habitantes, aunque Estados Unidos se empeñe en recrudecer su hostilidad.

‘Nada ni nadie detendrá la voluntad del pueblo cubano en la construcción de la sociedad socialista que ha decidido erigir en ejercicio de su libre determinación’, subrayó al intervenir en la segunda y última jornada del debate general de la sesión 207 de uno de los órganos constitutivos de la Unesco.
De acuerdo con el representante de la mayor de las Antillas ante el Consejo, su país mantendrá ese rumbo con apego a la paz y de conjunto con quienes desean relaciones entre La Habana y Washington basadas en el respeto, la igualdad soberana, la colaboración y el beneficio mutuo.
Sin embargo, precisó en esta capital, en la sede central de la Organización de la ONU para la Educación, la Ciencia y la Cultura, que el escenario bilateral se aleja cada vez más de esa aspiración, a partir de la agresividad de la actual administración en la Casa Blanca.
‘Desde que nos reunimos en abril, el bloqueo del gobierno de Estados Unidos contra Cuba ha sido fortalecido’, dijo el diplomático, quien calificó de genocida la política estadounidense hacia la isla.
León advirtió que ningún sector de la sociedad escapa del rigor de esta hostilidad, incluidos los ámbitos de la Unesco.
‘Otros pueblos del mundo son perjudicados también por su carácter extraterritorial. El informe anual del Secretario General de la ONU sobre el bloqueo contra Cuba contiene información copiosa sobre las afectaciones’, señaló en la sesión el presidente de la Comisión Nacional Cubana de la Unesco.
En su discurso, el embajador recordó que en pocos días la comunidad internacional volverá a tener la oportunidad de reclamar el fin del cerco económico, comercial y financiero impuesto a la mayor de las Antillas desde hace 60 años, en una nueva votación en la Asamblea General de la ONU.
Desde 1992, el principal órgano deliberativo de Naciones Unidas, en el que están en igualdad de condiciones sus 193 Estados miembros, respalda de manera contundente una resolución presentada por Cuba sobre la necesidad de levantar el unilateral bloqueo.
La votación de este año tendrá lugar el 7 de noviembre, un día después de que la isla introduzca ante la Asamblea la iniciativa destinada a rechazar un entramado de medidas con 922 mil 630 millones dólares de daños acumulados por su aplicación.

Transición histórica, con nuevo esquema de gobierno

La Asamblea Nacional de Cuba estrenó un nuevo esquema de gobierno al ratificar una restructuración con la que busca mejorar la gestión, y que incluye el nombramiento de Miguel Díaz-Canel como presidente y la salida del Consejo de Estado de los últimos representantes de la generación de la revolución.
Bajo la guía de la nueva Constitución proclamada el 10 de abril último tras un referéndum, la Asamblea Nacional del Poder Popular (Parlamento) designó a Miguel Díaz-Canel y Salvador Valdés Mesa como presidente y vicepresidente por un periodo de cinco años, prorrogable a un mandato adicional.
Díaz-Canel, ingeniero de 59 años que en 2018 sucedió a Raúl Castro, tendrá ahora tres meses para designar un primer ministro que encabece el Consejo de Ministros y a los gobernadores de las 15 provincias, nuevos cargos.
Así, Cuba resucita el cargo de presidente desaparecido hace 43 años, durante los cuales el Ejecutivo recibía los títulos de presidente de los Consejos de Estado y de Ministros, además de ocupar el puesto de primer secretario del Partido Comunista. La nueva estructura se entiende como un reparto del poder que se había concentrado, y un parcial relevo generacional.
También se eligieron a los miembros de un Consejo de Estado en el cual excluyeron los últimos representantes de la generación de la revolución. Esteban Lazo, líder de la Asamblea Nacional, fue designado presidente del Consejo de Estado de 21 miembros, que excluye ahora a los comandantes Ramiro Valdés, de 87 años, y Guillermo García, de 91, los últimos representantes de la generación que combatió con Fidel.
Raúl Castro, quien también es diputado y estuvo presente en la sesión parlamentaria, seguirá desempeñándose como secretario del poderoso Partido Comunista de Cuba.
El diseño trata de separar poderes, fortalecer a los gobiernos provinciales y liberar al presidente del día a día de los asuntos gubernamentales y distribuir los poderes entre varias figuras en consonancia con la Constitución que entró en vigor en abril. El Consejo de Estado es el principal órgano de la Asamblea, el Poder Legislativo del Estado comunista.
El cambio de esquema de gobierno no representa una modificación del modelo unipartidista en la isla. En su discurso ante los diputados, Díaz-Canel dijo que la sesión de la Asamblea Nacional tiene lugar cuando lo peor de la escasez de combustible terminó, pero advirtió que continuarán las medidas de austeridad. El mes pasado, el transporte público quedó paralizado, ante el bloqueo estadounidense del petróleo suministrado por Venezuela y bueyes remplazaron a los tractores por la falta de diésel.
Aunque poco conocido fuera de la isla, el proceso de redacción, discusión y puesta en vigor de la nueva Constitución suscitó un intenso debate interno y movilizó a la ciudadanía en torno a la actualización de la institucionalidad. Así, la elección del primer Gobierno surgido de la reciente Constitución trasciende lo cosmético y supone una restructuración de los órganos del Estado dentro de la visión cubana de cambio ordenado con objetivos de largo plazo.
Estas transformaciones políticas irán acompañadas de modificaciones en la política económica vigente, que actualice las pautas para el desarrollo sin extraviar el sentido social, manteniendo los logros de la revolución, salteando las barreras de la rigidez y el burocratismo, salvaguardando la soberanía del país.
Este cambio político coincide con el recrudecimiento de la ininterrumpida ofensiva de sanciones y bloqueo estadounidense contra Cuba que ya dura seis décadas. El anterior presidente, Barack Obama, trató de normalizar las relaciones, pero Donald Trump volvió a aplicar las más brutales políticas de asfixia económica, con criminales efectos devastadores sobre la población cubana.
Entre ellas, el bloqueo sistemático de la llegada de combustibles, prohibición a empresas de todo el mundo a sostener relaciones con entidades cubanas, restricciones a ciudadanos estadounidenses para viajar a la isla, bloqueo al envío de remesas y prohibición de transacciones bancarias.
El presidente Díaz-Canel señaló que “tras la escasez de combustible, generada por la terquedad del gobierno de Estados Unidos, el país volverá a la normalidad, pero no será con los mismos modos de hacer. Si algo bueno tuvieron estos días de tensión fue que sacaron a flote las enormes reservas con que cuenta Cuba para trabajar de manera más eficiente”.
“Por eso pondremos mayor énfasis en disminuir los gastos y ahorrar; en sistematizar las buenas soluciones nacidas de los años más duros del Período Especial, atemperadas a nuestra realidad, es decir, tomar en cuenta los avances tecnológicos y del conocimiento que pueden convertir un principio de trabajo, como el ahorro, en un motor del desarrollo”, dijo. “N adie va a quitarnos la confianza en el futuro que les debemos a nuestros hijos en la Patria que los padres nos ganaron de pie”, remarcó.
Desde el triunfo de la revolución, en 1959, los cubanos se han visto obligados a pensar su institucionalidad en el contexto de una guerra, que si bien hoy no es militar, se ampara en vías jurídicas, propagandísticas, diplomáticas, políticas y económicas.

Elmer Pineda dos Santos. Periodista cubano asociado al Centro Latinoamericano de Análisis Estratégico (CLAE, www.estrategia.la)

lunes, 14 de octubre de 2019

Comenzando la semana, hoy en la Mesa Redonda




Las protestas en Ecuador contra el paquete de medidas neoliberales impuesto por el gobierno y la situación en Siria tras la entrada del ejército turco a territorio sirio serán los temas principales de la Mesa Redonda de este lunes, la que también contará con la habitual sección "La Esquina".

Una visión crítica de la conquista de América




El primer impacto fue el asombro, luego el miedo ante las armas de fuego y la fuerza mágica del hombre blanco cubierto con armaduras y montado a caballo. Los invasores aprovecharon el desconcierto y la superioridad tecnológica para dominar fácilmente a las sociedades americanas más desarrolladas.

La irrupción europea transatlántica tuvo una trascendencia formidable. En pocos años se tuvo conocimiento de la dimensión planetaria, se posibilitaron nuevas rutas y el contacto con la diversidad humana; se potenció el comercio, la ciencia y la tecnología; y se generaron las bases del despegue capitalista y la Revolución Industrial, con el enorme y penoso costo dedos genocidios.
El arribo de Cristóbal Colón a América fue un emprendimiento que hizo posible uno de los hechos más destacados de la historia de la humanidad. Desde su desembarco en playas caribeñas, en menos de un siglo se pudo alcanzar el conocimiento de la dimensión del planeta y se vincularon culturas desconocidas entre sí. La ventaja para los europeos fue conocer la pólvora, la brújula, el papel y la imprenta, entre otras adquisiciones.
El acto de pisar tierra americana produjo una espectacular cadena de acontecimientos que transformó y dinamizó la sociedad humana. El descubrimiento de oro y plata en el “nuevo continente” desató un verdadero aluvión colonizador. Centenares de expediciones y millares de hombres fueron tras los pasos de los pioneros para intentar el logro de fabulosas fortunas.
En los primeros 150 años de acción conquistadora, 17 mil toneladas de plata y unas 200 toneladas de oro arribaron a España y potenciaron el incipiente desarrollo comercial y manufacturero europeo, que abrieron las compuertas de la Revolución Industrial y el desarrollo capitalista.
La navegación superó todos los límites y se aventuró hacia todos los rincones del planeta. El conocimiento del mundo comenzó a ser posible y el comercio empezó a diseñar el mercado internacional. El desarrollo económico terminaría por sepultar a la sociedad feudal y al absolutismo monárquico.
La ambición no encontró barreras infranqueables. En pocos años la inmensidad americana dejó de ser inexpugnable y españoles, portugueses, británicos, holandeses y franceses se disputaron el gigantesco botín.
Un siglo después de la llegada de la Santa María, La Niña y La Pinta alas Antillas, de los más de 70 millones de nativos americanos preexistentes, sólo quedaban tres millones y medio de almas. Primero, fueron derrotados por la desproporción de recursos, la sorpresa y la confusión. Luego, fueron privados de su cultura y creencias, sometidos al trabajo esclavo y a las enfermedades importadas por los europeos, que encontraron a sus organismos sin los necesarios anticuerpos para resistir a virus y bacterias invasores.
La casi extinción de la población nativa generó otro genocidio. Para sustituir a los americanos, se propicióla cacería de seres humanos, se arrancaron millones de africanos de su tierra ancestral y se comerció con ellos para utilizarlos como mano de obra esclava en socavones y plantaciones.
Medio milenio después, fue en vano el intento de ocultamiento del exterminio indígena y salió a la luz otra versión de la historia, atrás quedaron definiciones como el “Descubrimiento de América”, que pretendía ignorar la existencia de millones de seres humanos que habían descubierto el continente miles de años antes. También quedó rápidamente vetusta la intención de mostrar como amistoso el “Encuentro de dos mundos”, cuando en realidad se trató del violento aplastamiento de los nativos por parte de los forasteros.
No obstante, no se puede dejar de reconocer que la llegada europea a las costas americanas produjo un avance notable de la humanidad, pero el progreso no puede ocultar la magnitud de la tragedia consumada.
La sociedad capitalista se concibió a partir del genocidio, la esclavitud y el saqueo impulsado por las potencias europeas de la época. El alumbramiento del nuevo sistema económico se amasó con la sangre de millones de seres humanos.

El encontronazo del 12 de octubre de 1492

Las hipócritas denominaciones con las que fue conmemorado cada aniversario de la llegada de Colón a tierras americanas, pusieron de manifiesto el intento de disimular, encubrir y minimizar los crímenes cometidos. Celebrar el “Descubrimiento de América” significaba omitir, nada menos, que existían unos setenta millones de seres humanos que ya habían descubierto al continente y prosperaban en él.
La improvisada denominación de “Encuentro de dos culturas” o “de dos mundos”, fue sólo un intento de falsificar la historia, dado que ese encuentro no tuvo nada de protocolar o pacífico, como cínicamente pretendieron insinuar sus ideólogos y difusores. La evidencia del genocidio desatado, el saqueo de sus incalculables riquezas y el sometimiento de los sobrevivientes presentaron un cuadro muy distinto al pretendido, exponiendo un verdadero “encontronazo” donde el desequilibrio tecnológico impuso sus trágicas desproporciones.
La expedición de Colón fue una destacada empresa que hizo posible uno de los acontecimientos más importantes de la historia humana: tomar conciencia de la magnitud del planeta y poder comunicar sus diversos puntos geográficos. Así, se pudieron relacionar mundos antes desconocidos entre sí, algunos en estadios muy primitivos de desarrollo otros más avanzados, como los europeos, que ya conocían la brújula, la pólvora, el papel y la imprenta.
Se transformaron las economías cerradas del Medioevo para constituir un mercado mundial. “Los descubrimientos de los yacimientos de oro y plata en América, la cruzada de exterminio, la esclavización de las poblaciones indígenas, forzadas a trabajar en el interior de las minas, el comienzo de la conquista y del saqueo de las indias, la conversión del continente africano en cazadero de esclavos negros, son todos hechos que señalan los albores de la era de producción capitalista (...) Las riquezas apresadas fuera de Europa por el pillaje, la esclavización y la masacre refluían hacia la metrópolis donde se transformaban en capital” (Carlos Marx, El Capital Tomo I).
El oro y la plata americanos contribuyeron a forjar los primeros grandes capitales europeos, que dinamizaron la economía y detonaron el fin del feudalismo y, posteriormente, la Revolución Industrial.
Así se fue gestando la sociedad capitalista que, como contrapartida, significó un importante avance en la historia de la humanidad. El capitalismo desplegó sus máximas posibilidades de desarrollo en los países más avanzados de la época, donde se produjeron los saltos más dinámicos en la primitiva acumulación de capital, basados esencialmente en el pillaje, la ampliación de las fronteras y la repartición del mundo. Simultáneamente, se generó un desarrollo incesante de las ciencias, el conocimiento, las técnicas productivas, las posibilidades de consumo y de supervivencia humana.
El capitalismo logró cumplir un rol progresivo, sólo interrumpido por las crisis cíclicas que desquiciaban periódicamente la producción y su economía, dejando en evidencia las limitaciones del sistema.
A pesar de este notable aporte a la evolución humana, el capitalismo desde sus primeros pasos denotó sus características salvajes, corruptas e inhumanas que continuaron manifestándose en plenitud hasta la actualidad.

Bernardo Veksler
Escritor
Sábado 12 de octubre

domingo, 13 de octubre de 2019

Ecuador: lucha de clases y crisis política en el cinturón del continente




Las imágenes impactan. Del otro lado de la pantalla las barricadas arden. Los hechos ocurren a miles de kilómetros. Y, sin embargo, suceden muy cerca de la Argentina.

Desde hace más de diez días, Ecuador se sacude por una potente movilización social. En las calles confluyen indígenas, trabajadores, mujeres, jóvenes y el pueblo en su conjunto. Enfrentan la represión policial, hacen arder vehículos, atacan los símbolos del poder. Evocando aquellos primeros años del siglo XXI, elevan la temperatura de este subcontinente que es América Latina.

Continuidad, cambio, ajuste

Lenín Moreno llegó a la presidencia ecuatoriana en abril de 2017. De la mano del propio Rafael Correa, su elección fue presentada como una batalla épica por todo el progresismo latinoamericano. En aquel entonces, en un efusivo saludo, Cristina Kirchner expuso el resultado electoral como un triunfo “para el Ecuador y para toda la Patria Grande”.
Presentado como “continuidad con cambios” de la Revolución Ciudadana de Correa -cuya vicepresidencia ocupó entre 2007 y 2013-, Moreno expresó un giro a derecha para pactar con los sectores conservadores y neoliberales, buscando adaptarse a las nuevas condiciones económicas internacionales.
El derrotero que siguió da una idea de la posible dinámica que hubiera tenido lugar en una Argentina gobernada por Daniel Scioli. A solo dos meses de haber asumido, detonó la alianza gobernante destituyendo al vicepresidente Jorge Glas, cercano a Correa. La medida, tomada en el marco de un discurso anticorrupción, fue aplaudida por el gran capital.
Dentro del progresismo que lo había empujado al poder se ganó el mote de “traidor”, epíteto que se usa con demasiada frecuencia y se olvida con otra aún mayor.

Shock de neoliberalismo

El pasado 1.° de octubre, en el marco de las negociaciones con el Fondo Monetario Internacional, el gobierno de Lenín Moreno encaró un brutal ataque contra las grandes mayorías populares.
Por medio del Decreto 883 estableció el fin de los subsidios a los combustibles. En un país signado por la dolarización de la economía, la medida supone un durísimo ataque a las condiciones de vida de amplias capas de la población, golpeando de lleno sobre el precio del transporte y empujando el aumento de todos los productos básicos. Los transportistas y amplias capas de los campesinos están entre los principales afectados.
Sin embargo, los empresarios del transporte –que son quienes encendieron la mecha de las protestas el 1.° de octubre– levantaron el paro sectorial a los pocos días, tras negociar un aumento del pasaje, que pasará de 25 a 35 centavos de dólar. Desde ese momento el protagonismo de las protestas quedó centralmente en manos del movimiento indígena, agrupado en la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (Conaie).
A esa inyección de neoliberalismo puro se suma un paquete de medidas destinadas a profundizar un ajuste al servicio del gran capital. Allí hay que contabilizar un combo que incluye reforma tributaria y laboral.
En el marco de la primera, como señala Alejandro Olmos en una entrevista publicada en este suplemento, el gobierno condona alrededor de U$D 3.000 millones de deuda a petroleras, telefónicas, grandes exportadores e importadores. “Están condonando a los grandes grupos que manejan la economía del país”, señala el investigador. La magnitud de la cifra se hace evidente cuando se compara con el préstamo que el país negocia con el FMI: U$D 4.200 millones.
La reforma laboral supone medidas tan reaccionarias como reducir un 20 % el salario para todos los nuevos trabajadores, habilitar por un año la contratación a plazo fijo y achicar el período vacacional de los empleados públicos a la mitad. Propone, además, nuevos avances en materia de flexibilización de las condiciones de trabajo para el conjunto de los asalariados. Además, por medio de la reforma tributaria se les quitará un día de sueldo por mes a todos los empleados estatales.
Las medidas empujaron a la calle a cientos de miles de manifestantes. Las organizaciones sindicales que agrupan a sectores de la clase trabajadora y del campesinado se movilizaron masivamente, enfrentándose con las fuerzas represivas. Aunque la rebelión cuenta con la participación del conjunto de las masas, el protagonismo político y mediático ha caído sobre la Conaie.
La creciente radicalización se expresa también en el cuestionamiento a las instituciones del poder estatal. En localidades del interior del país, esto empujó a la toma de control en algunos territorios por parte del movimiento indígena, destituyendo a las autoridades y arrestando, incluso, a efectivos de las fuerzas represivas.
Sin embargo, esa dinámica choca con los límites impuestos por la cúpula de las organizaciones sindicales. Aunque en cada barricada se reclama la inmediata renuncia de Lenín Moreno, las conducciones de la Conaie, el FUT (Frente Unitario de Trabajadores) y del movimiento estudiantil vienen limitando las demandas al retiro del Decreto 883 y a la renuncia de los ministros de Defensa y de Gobierno. Además, plantean vagamente que se tiene que ir el FMI. En esa perspectiva, este sábado anunciaron que podrían sentarse a negociar con el gobierno una posible “revisión” del decreto.
¿El argumento? No hacerle el juego al ex presidente Rafael Correa. La realidad es, sin embargo, bastante distinta. El hombre que gobernó los destinos de Ecuador por una década solo pide la renuncia de Moreno. Correa exige adelantar elecciones en pos de desviar el levantamiento en curso hacia una salida electoral, que permita oxigenar al régimen para volver a la carga con más ajuste.
Hoy es imposible expulsar al FMI sin plantear la caída de Moreno, tal como se niega a levantar la Conaie. Eso tampoco puede ocurrir desviando el levantamiento hacia una salida electoral, como sostiene Correa. Ese fue el camino bajo el que se terminaron encauzando las rebeliones populares previas, que llevaron a la salida de Bucaram (1997), Mahuad (2000) y de Lucio Gutiérrez (2005). De hecho, el ascenso del mismo Correa fue producto del desvío de todo aquel proceso, cuando asumió en 2007.
La única forma de acabar con los planes del FMI es derrotando efectivamente a Moreno e imponiendo una salida independiente de los trabajadores, indígenas y el pueblo pobre. Cualquier otra perspectiva dará sobrevida al gobierno actual o allanará una vuelta de Correa. Para avanzar en ese camino es necesario comenzar por unificar a los sectores en lucha, superando a las direcciones burocráticas, para imponer mediante una huelga general política, y sobre las ruinas del actual régimen, una Asamblea Constituyente libre y soberana, que se proponga abordar todos los grandes problemas del país.
La lucha por una asamblea de estas características, sostenida y defendida por la movilización organizada de las masas, puede permitir que el movimiento avance en la convicción de que solo un gobierno de los trabajadores, el pueblo pobre y las naciones indígena-campesinas podrá establecer una salida definitiva a los males que aquejan al pueblo ecuatoriano.

Dependencia enraizada

El politólogo argentino Andrés Malamud sentenció alguna vez que “después de tanto debate sobre progresismo y populismo, los padres de la voluntad política resultaron ser la soja y el petróleo. Pero la madre es China” [1].
Ecuador, como el conjunto de América Latina, sufre las consecuencias de un enorme atraso económico y del lugar subordinado que ocupa en la división mundial del trabajo. Con una estructura notoriamente primarizada, el balance de su economía depende de las exportaciones de petróleo crudo, minerales, plátanos y bananos, camarones y flores naturales, entre otros productos [2].
Ese atraso y dependencia tiene su expresión más cruda en la dolarización de la economía, adoptada en enero del año 2000, bajo la gestión de Mahuad. La medida, sostenida a lo largo de dos décadas por todos los gobiernos, implica una restricción severa de la soberanía nacional, al tiempo que impone enormes tensiones estructurales.
Durante la década en la que Correa dirigió los destinos de Ecuador esta estructura se sostuvo. El breve período transcurrido entre 2007 y 2010 constituyó una suerte de “momento dorado” de su gestión. Fueron años signados por el llamado a una Asamblea Constituyente y por la auditoría y renegociación de la deuda externa.
Sin embargo, acompañando el destino de sus pares progresistas de América Latina, el momento de un giro hacia el ajuste llegó pronto. La vuelta al endeudamiento externo se combinó con medidas destinadas a favorecer el negocio petrolero y la minería. El extractivismo se ratificó como política de Estado y se convirtió en uno de los puntos de ruptura entre el correísmo y las direcciones indígenas.
En esa dinámica, el entonces presidente se abalanzó, tijera en mano, sobre las condiciones de vida de la clase trabajadora. Lo hizo limitando el derecho a la sindicalización, flexibilizando las condiciones laborales y, particularmente, atacando a los empleados públicos, lo que incluyó miles de despidos [3]. El período correísta estuvo muy lejos de revertir la herencia de precarización construida en el país durante los años ’90.
Aquel ciclo tampoco cuestionó la concentración de la tierra. Un estudio publicado por la Secretaria Nacional de Planificación (Senplades) a fines de 2014 señalaba que “en el país aún existe un modelo de desarrollo agropecuario excluyente para el campesinado y acaparador de la tierra cultivable; la pequeña y mediana agricultura representan el 84,5% de las UPAs [Unidades Productivas Agropecuarias, NdR] y controlan el 20% de la superficie de tierra, mientras que la agricultura empresarial representa el 15% de las UPAs y concentra el 80% del suelo cultivable” [4].
Mirada de conjunto, la llamada Revolución Ciudadana perpetuó los problemas estructurales que hacen al atraso de Ecuador. Al mismo tiempo sostuvo y profundizó la extendida precariedad laboral de la clase obrera.
El último período de Correa estuvo signado por el enfrentamiento con sectores del movimiento obrero y el campesinado, como resultado de sus políticas de ajuste. Salvando una multiplicidad de diferencias, el correísmo operó como el PT en Brasil en el segundo mandato de Dilma Rousseff, o como el kirchnerismo en la Argentina de 2012-2015. Esa dinámica fortaleció a las fracciones políticas orgánicamente ligadas al gran capital y al imperialismo, abriendo el camino para que alcanzaran el poder.
La elección del “mal menor” volvió a ser, una vez más, el camino directo hacia males mayores. La izquierda reformista latinoamericana le abrió la puerta a la derecha de los Bolsonaro, Macri y Lenín Moreno.
Recordemos que Michel Temer, artífice del golpe contra Rousseff, era su vicepresidente y parte de la coalición del gobierno del PT. En Argentina, Scioli fue el candidato propuesto por el kirchnerismo para cumplir el papel del Moreno local. Durante estos años dejó claro su aval a múltiples medidas de ajuste implementadas por Macri. Lejos estuvo de ser el único político peronista en hacerlo.

Los límites al ajuste

Lenin Moreno se estrelló contra dos elementos que recorrieron, en mayor o menor medida, a todos los proyectos de la llamada “nueva derecha” regional. En primer lugar la crisis –que va mucho más allá de Ecuador– de la hegemonía neoliberal y de la llamada “globalización”. A eso hay sumar una situación económica gravosa, con tendencias hacia una recesión global, cruzada por la guerra comercial entre Estados Unidos y China, que afecta tanto al financiamiento como las exportaciones de los países dependientes de la región.
En segundo lugar, y con diferencias según el país, debieron lidiar con la relación de fuerzas continental y un movimiento de masas que no ha recibido derrotas significativas. Una relación de fuerzas que ha impedido a la derecha imponer fácilmente el conjunto sus planes de ajuste. La inestabilidad política de esos “experimentos” –como llamó el periodista Carlos Pagni a Cambiemos– debe buscarse también en esa resistencia.
La dura derrota electoral sufrida por Macri en agosto pasado, las tensiones que recorren al gobierno de Bolsonaro en su primer año o la imposibilidad de imponer la salida golpista en Venezuela, son solo algunas de las evidencias de esos límites políticos y sociales más profundos. En esa inestabilidad –ligada a la relación de fuerzas más general– hay que contabilizar también la caída del gobernador puertorriqueño Ricardo Rosselló por la movilización de masas –ocurrida en agosto pasado–; la crisis que asola por estas horas a Perú; o las violentas movilizaciones callejeras en Haití que también tienen un trasfondo de ajuste y miseria como consecuencia de los planes del FMI.
La respuesta en las calles al ajuste de Lenín Moreno viene a ratificar que en la situación latinoamericana lo único estable es la inestabilidad.

Los contornos de la Patria Grande

En la presentación de un libro publicado recientemente, Massimo Modonesi sostiene que “la América Latina de inicio del siglo XXI fue caracterizada por la irrupción un antineoliberalismo desde abajo que derivó en proyecto progresista implementado desde arriba, que se proclamó posneoliberal, fue cuestionado por sus rasgos populistas y terminó siendo acorralado por una combinación de protestas surgidas a su izquierda y por la reacción restauradora de las derechas neoliberales de matriz oligárquica” [5].
A trazo grueso se puede suscribir la afirmación. Lejos del relato progresista construido por años, el ciclo neoliberal fue cuestionado en las calles por la movilización popular. En esa tarea, el pueblo ecuatoriano supo ser vanguardia derribando a tres presidentes. En el historial de aquel período hay que incluir las caídas revolucionarias de Fernando De la Rúa en Argentina (diciembre de 2001), Gonzalo Sánchez de Lozada (2003) y Carlos Mesa (2005), ambos en Bolivia.
Los gobiernos posneoliberales se limitaron a tomar el guante de la relación de fuerzas dejadas por aquellas rebeliones y administrar sus Estados en el contexto de un ciclo mundial más que favorable para las commodities. Lejos de revertir el atraso latinoamericano, los voceros de la “Patria Grande” profundizaron la primarización de las economías y la dependencia del mercado mundial. A pesar de los discursos pomposos, los limitados procesos distributivos se dieron en el marco de un sagrado respeto al poder del gran capital local e imperialista.
Como a inicios de siglo, el fuego que arde en las barricadas de Quito ilumina el continente. La lucha de clases, eterno motor de la historia, se vuelve a encender. Los elencos gobernantes de cada nación pueden tomar nota: los ejemplos recientes indican que, cuando ya no hay lugar para concesiones y se pretenden aplicar los planes de ajuste del FMI sin anestesia, la resistencia en las calles se hace presente.
Cuatro mil kilómetros al sur, cabe preguntarse si Alberto Fernández no debería mirarse en el espejo de Lenín Moreno. Las vagas promesas del candidato presidencial peronista de “encender la economía” y “volver a levantar al país” chocan con los determinantes que imponen al país la tutela del FMI y el masivo endeudamiento. La publicidad de la “dura negociación” culminó hace semanas. Por estas horas se propone una salida “a la uruguaya” que implica pagar hasta el último centavo del último dólar. Los grandes especuladores miran, sonríen y empiezan a aplaudir.
Yendo un paso más allá en el mismo camino, hace pocos días Sergio Massa se allanó al discurso imperialista en Washington, señalando que en Venezuela “hay una dictadura”. La declaración tenía lugar mientras el gobierno de Lenín Moreno acusabar falsamente a Nicolás Maduro de estar detrás de las movilizaciones.
Los levantamientos populares que marcaron el inicio del siglo tuvieron un límite. Diluida en la marea popular, la clase trabajadora no pudo imponer su impronta y un programa propio que diera salida a la crisis poniendo en jaque el poder capitalista. Kirchnerismo, correísmo, chavismo o lulismo fueron algunos de los resultantes de esa impotencia. Reconstruyendo la institucionalidad capitalista y pasivizando la movilización de masas, los gobiernos posneoliberales se convirtieron en un largo rodeo para que la derecha volviera a ocupar el centro político y el poder.
Un destino independiente para América Latina está ligado, indefectiblemente, a que la clase trabajadora construya sus propias organizaciones independientes, y levantando un programa anticapitalista, antiimperialista y socialista, logre agrupar a los pobres de la ciudad y del campo, a los pueblos originarios y al conjunto de los oprimidos y oprimidas del continente, en la perspectiva de la conquista revolucionaria del poder.

Juan Andrés Gallardo
Eduardo Castilla

Notas

[1] Por qué retrocede la izquierda, Capital Intelectual, p. 55.
[2] Evidenciando el peso de las exportaciones petroleras, un informe del Ministerio De Producción, Comercio Exterior, Inversiones y Pesca señala que “al mes de diciembre de 2018, la balanza comercial total registró un déficit de USD 264 millones. La balanza no petrolera mostró un déficit de USD 4.751 millones”. En el mismo informe se indica que el 77 % de los productos exportados son bienes primarios.
[3] "Según Cano y Buitrón (2012), en el periodo que va del 2008 al 2011, en el sector público hay 68 instituciones públicas que han separado a 12.077 trabajadores por distintas razones: jubilación 321; retiros obligatorios por más de 70 años 653, supresión de partidas 3.999; terminación laboral 1.375; sumarios administrativos 0; vistos buenos 580; despidos
intempestivos 4.512; y destituidos 637". Citado en Situación, estrategia y contexto de los sindicatos en el Ecuador, en http://biblioteca.clacso.edu.ar/clacso/becas/20150407122930/VFSindicatosEcuador.pdf.
[4] Citado en problemáticas de la tierra en el Ecuador, Esteban Daza Cevallos, en https://lalineadefuego.info/2015/06/23/problematicas-de-la-tierra-en-el-ecuador-por-esteban-daza-cevallos/.
[5] Los gobiernos progresistas latinoamericanos del siglo XXI. Ensayos de interpretación histórica, UNAM, p. 9.